Allez les bleus! Sitios para celebrar a Francia en Barcelona
Francia ganó la copa del mundo y algunos de estos locales en la ciudad, regentados por franceses, se han ganado nuestros corazones
Francia ganó la copa del mundo y algunos de estos locales en la ciudad, regentados por franceses, se han ganado nuestros corazones. No es imprescindible amar el fútbol para amarles también.
L’escale
El interés gastronómico que esta ciudad sigue despertando en los cocineros del mundo ha dado como resultado este pequeño bistró, que nace de la tradición hostelera que el chef Julien Rivoiron lleva en la sangre. Su familia regentó el Café des Fédérations en Lyon y desde hace varios años el joven veinteañero vive en Barcelona. Hace poco más de un año abrió en una de las calles más hermosas de l’Eixample este rinconcito francés que recuerda mucho las casas de comida de aquel país. Cocina del mundo, con técnicas francesas, menú de mediodía que cambia cada semana, menú degustación a un precio accesible, vinos de primera, servicio sencillo y familiar, decoración austera, pero con un excelente gusto, y poco más. Le ayuda en los fogones Xavier Ferré, que viene del extrarradio parisino y ha trabajado como repostero en Lasarte, así como en Disfrutar y en Mina (Bilbao). En la sala, atiende Anissa Meguedmini, pade París. Para beber, sugerimos el vino de la bodega familiar de Rivoiron, así como sus digestivos caseros, de ajenjo o albahaca. Visitar este espacio para comer o cenar es como tomar un tren hasta el corazón de cualquier villa francesa, quesos incluidos. Excelente opción para celebrar algo o simplemente celebrar la vida, que ya es bastante. Pour la vie!
Passatge Lluís Pellicer, 12
Café Emma
Romain Fornell (Caelis *, Casa Leopoldo, Joel’s Oyster Bar, Café Turó, Hotel Ohla, Hostal La Gavina, Épiceri) y Michel Sarran (Michel Sarran **) abrieron este local hace algunos años y, a pesar de la crisis, el paso del tiempo y las altas y bajas en el servicio, y hasta que alguien demuestre lo contrario, ofrecen el mejor steak tartar de la ciudad. Mantequilla para echarse a nadar, pan de 10, patatas en su punto, terraza apretujada y con las sillas omnipresentes de los bistrós de París. Ostras con champán de primero, tartar de carne de segundo: la fórmula clave.
Pau Claris, 142
Le Menhir
Crepes y más crepes, ambiente familiar, relajado y con ese toque muy francés que hace que cualquier espacio, por más sencillo que sea, luzca bien. El Poblesec se torna bretón con esta crepería que honra a Ásterix y a Óbelix. Abren solo por las noches, salvo sábados y domingos que abren también a mediodía. Para beber, ¡sidra, por Tutatis! El reducto galo de Barcelona.
Fontrodona, 17
Fromagerie Can Luc
Hace un par de años, le pregunté a Laia Zeiger, periodista alsaciana radicada en Barcelona, sobre su enclave francés favorito en la ciudad, no tardó más de un segundo en responder «Can Luc». No es necesario ir a Ceret o a Cèrbere para traer quesos y productos lácteos franceses de primera. En el pequeño local, en las inmediaciones del mercado de la Llibertat, en Gràcia, Luc Talbordet lo borda. Aquí no hay solo quesos franceses, tiene más de 150 referencias que incluyen también productos de España, Inglaterra, Holanda, Suiza o Italia. Vinos, latería y otras delicias, hacen que la tienda de Luc se vuelva un paraíso en la tierra. El problema no es llegar, sino salir de ahí.
Berga, 4
El pastelero francés
Philippe Lopez trabaja sobre todo para restaurantes, preparando algunas de las exquisiteces más conocidas de la repostería clásica: selva negra, mil hojas, profiteroles y mucho más. Lopez lo clava con cada una de sus creaciones. Si hay suerte, y no tiene demasiada faena, trabaja también para los particulares que se acercan a su pequeño taller de Gràcia.
Martínez de la Rosa, 1. Tel. 932371195
Otros
Tempo.- cafetería francesa en Sant Antoni. Calàbria, 62.
Ginette.- restaurante fusión de la cocina de Francia, Cataluña y el resto de España. Petfriendly. Rec Comtal, 12.
Maison Puyvalin.- productos delicatesen traídos desde Francia: foie, tarrinas, quesos, vinos, condimentos, platos para llevar y un largo etcétera. Trafalgar, 23.
