Lidl, primer súper en alcanzar una reducción de hasta 425 toneladas de azúcar y sal
La cadena de distribución fue la primera en España en retirar los huevos de gallinas enjauladas y las bolsas de plástico y ahora ha reformulado el 10% de sus productos para hacerlos más saludables
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Lidl ha sido la primera enseña en España en reducir sal, azúcar y grasas saturadas en el marco del «Plan de colaboración para la mejora de la composición de alimentos y bebidas y otras medidas (NAOS)», promovido por el Ministerio de Sanidad y Consumo a través de la AESAN Agencia Española de Seguridad Alimentaria. En ese plan se recogen los compromisos de reformulación de los sectores de la fabricación y de la distribución para varios tipos de alimentos y bebidas de consumo habitual en los niños, niñas, jóvenes y familias, centrándose en la reducción de azúcares añadidos, sal y grasas saturadas
La enseña asegura en un comunicado que ha examinado 13 grupos de alimentos, entre los cuales destaca hasta más de 25 productos de la familia de los lácteos , como su surtido de yogures de sabores Milbona, y ha conseguido reducir un 5% más de lo requerido por ASESAN. También lo ha hecho en los platos preparados como las croquetas Monissa, que contienen hasta un 31% menos de sal de lo exigido, superando así los mínimos establecidos por el Plan NAOS. De este modo, la compañía asegura haber reducido hasta 425 toneladas de azúcar y sal anuales, lo que equivaldría a más de un millón de terrones de azúcar, o lo que es lo mismo, más de 21.200 tazas de cafés llenas de azúcar o sal Un terrón de azúcar contiene 4gr y una taza de café tiene una capacidad de 200gr.
Sin aumentar las grasas
Las categorías analizadas por la compañía han sido aperitivos salados, bebidas refrescantes, bollería y pastelería, cereales de desayuno, cremas de verduras, derivados cárnicos, galletas, helados, néctares de frutas, pan envasado, platos preparados, productos lácteos y salsas. La mejora de los productos reduciendo azúcares, sal y grasas saturadas se ha realizado sin perder de vista las calorías totales: así, Lidl asegura que se evita por ejemplo, que en un alimento se reduzca el azúcar a costa de aumentar la grasa, de modo que al final el producto acabe teniendo las mismas o incluso más calorías La cantidad de calorías diarias recomendadas para adultos según la OMS son 2000kcal diarias.
La compañía afirma que gracias a su estrecha colaboración con sus proveedores , ha logrado cumplir con los objetivos del pacto NAOS e incluso, ha conseguido reducir en su gran mayoría de artículos, un porcentaje superior de azúcar, sal y grasas saturadas a los preestablecidos. Lidl trabaja desde hace cinco años en un ambicioso plan con el objetivo de, entre otros, reducir hasta un 20% el contenido medio de sal y azúcares añadidos en su surtido de marcas propias en el horizonte del año 2025.
Los niños superan los límites de la OMS
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda reducir la ingesta de azúcares a menos del 10% de la ingesta calórica total. Sin embargo, hay estudios que indican que el 53,9% de niños, niñas y adolescentes en España superan dicho límite, según un estudio de AECOC titulado «El contenido de azúcares en los grupos de alimentos y bebidas procesados más consumidos por la población española, 2016». Uno de los elementos determinantes de la política de compra de alimentos de Lidl es la optimización de sus marcas propias en cuanto al contenido de azúcar y sal. En el marco de este objetivo, por ejemplo Lidl logró en 2017 eliminar 1.000 toneladas de azúcar en sus refrescos.
«Nuestro compromiso con la alimentación saludable nos exige contribuir y seguir trabajando de forma muy estrecha con todos nuestros proveedores, de forma que podamos promover activamente una alimentación consciente, ofreciendo a nuestros clientes un surtido amplio de alimentos de alta calidad que les permita llevar una dieta saludable y responsable», afirma Miguel Paradela, director general de compras de Lidl España.
El éxito de la panadería
En cuanto a productos horneados, Lidl se convertido en el segundo distribuidor en venta de pan en nuestro país, con una cuota de mercado de casi el 6%, según datos recientes de la consultora Kantar. La apuesta de incluir un obrador dentro del súper para elaborar pan y bollería fresca comenzó en Lidl en el año 2006, con tan solo dos referencias básicas; barra y baguette . En la actualidad, la compañía ha desarrollado y sofisticado su surtido hasta cerca de 60 referencias, siendo la primera cadena de distribución en implementar, en el 2012 y tras una inversión de más de 190 millones de euros, un sistema de horneo continuo en tienda de hasta tres veces al día, además de un innovador sistema de autoservicio para el cliente que no tiene que tocar el producto y la primera máquina cortadora de pan de España en un supermercado.
Además, destacan sus surtidos regionales , ya que existen más de diez panes de recetas por territorios autonómicos, a las que próximamente se unirán ocho más. La apuesta por el producto local de calidad también se está desarrollando en esta categoría. Actualmente, el 70% del surtido de pan que vende Lidl en sus establecimientos es de origen español. Destacan sus panes elaborados con masa madre, formatos diferentes y masas con cereales como el centeno, la espelta y el trigo de sarraceno, así como con harinas integrales. Esta apuesta ha supuesto que más de 9 millones de hogares españoles escojan esta cadena para realizar su compra de pan fresco cada día, según una nota facilitada por la enseña.