¿Vender palomitas en el cine o llenar la sala? Las claves de la reactivación cultural en Cataluña
El Procicat aprueba una decena de planes sectoriales sobre la vuelta a la actividad de cines, teatros, monumentos y salas de conciertos
Se prohíben audioguías y consignas y se considera a actores y músicos como convivientes habituales
La mascarilla ha venido para quedarse. Y junto a ella un largo listado de normas, recomendaciones y dilemas de difícil resolución que acompañarán al sector cultural catalán como mínimo durante todo el verano y parte del otoño. Así se desprende del conjunto de planes sectoriales para la reanudación de la actividad en cines museos, bibliotecas, archivos, teatros, salas de conciertos y exposiciones y monumentos elaborados por la conselleria de Cultura y aprobados este viernes por el comité técnico del Procicat.
Se trata de una serie de pautas para retomar la actividad cultural «con las máximas garantías, tanto para los trabajadores como para los públicos» que, además de mantener la distancia de seguridad de metro y medio y los aforos de entre 1.000 y 3.000 personas, según el recinto, incluye novedades como considerar a los profesionales de las artes escénicas y musicales convivientes habituales, lo que les permitirá mantener la distancia interpersonal de seguridad ni utilizar mascarilla. Eso sí: en compañías estables se tendrá que acreditar la ausencia de síntomas durante 14 días, mientras que en aquellas en las que existan mayor rotación de actores serán necesarias pruebas homologadas.
Fuera del escenario, en plateas y butacas, la mascarilla seguirá siendo de uso obligatorio siempre que no se pueda mantener la distancia obligatoria, lo que podría permitir a cines y teatros abrir con la totalidad de aforo siempre que todo el público lleve la boca cubierta. En este caso, los cines tendrán que decidir si prefieren llenar la sala o vender palomitas, ya que la presencia de alimentos en la sala activa de nuevo la distancia de seguridad. «En el caso de consumo de alimentos y bebidas que hagan inviable el uso de mascarilla constante, se ha de garantizar una distancia de 1,5 metros entre personas y por tanto una superficie por persona de 2,5 metros cuadrados.
Libros sin (casi) cuarentena
El Procicat también incorpora la figura de grupos de contacto habitual, formado por personas que puede que no vivan juntas pero que durante 14 días hayan mantenido un contacto «estrecho y frecuente». En este caso, sí que se podrán sentar juntos.
En los documentos aprobados destaca también la reducción de las cuarentenas para los libros de las bibliotecas, que pasa de 14 días 48 horas, la priorización de las actividades al aire libre, la prohibición de servicios de consigna y guardarropa o, en el caso de la danza, la recomendación de que los bailarines lleven el pelo recogido durante sus actuaciones. También se prohíbe el uso de audioguías en museos y monumentos y se recomiendo que los conciertos sinfónicos reduzcan su duración a entre 60 y 80 minutos para evitar pausas y descansos.