El Festival de Pedralbes se aplaza a 2021 y quiere reconvertirse este año en terraza estival

Ahora que ya empieza a quedar claro que avanzamos a marchas forzadas hacia un verano sin festivales de música ni grandes concentraciones, algunas citas empiezan a tirar de ingenio para reconvertirse e intentar salvar si no toda la casa por lo menos sí que parte de los muebles. Es el caso del Festival de Pedralbes, que lleva días trabajando con la idea de convertirse en la gran terraza estival de Barcelona.

La idea, explica su director, el siempre entusiasta Martín Pérez, es aprovechar el espacio en el que debía celebrarse el festival, los recoletos Jardines de Pedralbes, para ofrecer actuaciones de pequeño formato para unas 800 personas durante todo el verano. Con unas dimensiones de ocho hectáreas, apunta Pérez, los jardines son lo suficientemente grandes como para poder abrirse al público cumpliendo las medidas de seguridad establecidas. Incluso, llegado el momento, podría incrementarse el aforo a 1.200 para unas veladas en las que se baraja la posibilidad de encadenar un par de actuaciones como las que ya acogía el Village del festival antes del concierto principal así como alguna sesión de DJ.

Otra cosa es saber en qué punto se encontrarán los protocolos sanitarios a partir de verano y si se podrá servir o no comida y bebida. «Si no se puede, no lo haremos», avanza antes de señalar que su intención es alargar la iniciativa durante todo el verano y no únicamente durante las fechas previstas para el festival.

Antes de eso, claro, había que dar por perdida la edición oficial de este verano, algo que el festival hizo ayer pasadas las nueve de la noche con un comunicado en el que informaba que la edición 2020 no se suspendía, sino que se aplazaba a 2021. La puntilla, aseguran, fueron las palabras del pasado martes del ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes, quien aseguró que «para los festivales tendremos que esperar, decidiremos cuando llegue el momento», declaración que, sin duda, choca frontalmente con los tempos de algunas citas que, de celebrarse, deberían estando ya preparando el montaje.

En cualquier caso, la idea con la que la trabaja ahora la organización del festival de Pedralbes es prácticamente calcar el cartel que había ideado para esta octava edición, coronado por nombres como Patti Smith, Diana Ross, Cat Stevens, Brian Ferry, entre otros, y trasladarlo doce meses en el calendario. De ahí que se haga especial hincapié en que las entradas adquiridas para este año serán válidas para el próximo verano aunque en caso de no poder asistir a la nueva fecha, añaden, se ofrecerán «diversas opciones para recuperar el importe». La duda se despejará este viernes, cuando se anuncien las nuevas fechas de las actuaciones.