CRISIS DE SEGURIDAD
La Policía Nacional se integra en un operativo de Mossos contra los carteristas del Metro de Barcelona
El dispositivo, en las estaciones más turísticas de la ciudad, busca atacar la multireincidencia y ha acabado con un detenido y 30 identificados por cuestiones de extranjería
Los Mossos d'Esquadra y la Policía Nacional se han desplegado este martes al mediodía en varias de las estaciones más concurridas del Metro de Barcelona en un dispositivo conjunto contra los carteristas que actúan en el suburbano de manera reiterada. El operativo, contra uno de los focos de la inseguridad de la capital catalana, se ha iniciado en la estación de Sagrada Familia y ha durado unas dos horas, durante las que los agentes han peinado parte del suburbano barrcelonés.
Como consecuencia del dispositivo se han identificado a 43 personas y una de ellas ha quedado detenida por los Mossos por hurto en el Metro. Además, otras 30 personas han sido trasladadas a comisaría por la Ley de Extranjería: se trata de delincuentes multireincidentes que se han detenido en varias ocasiones en el Metro, siempre relacionados por delitos contra el patrmonio.
La operación se ha iniciado sobre las 13:00 horas y ha sido impulsada por los Mossos y con la participación de agentes de la Policía Nacional, en el ámbito de sus competencias para la aplicación de la Ley de Extranjería. Cerca de unos 100 agentes de ambos cuerpos han estado en el operativo con las tareas de comprobación de la situación legal de los identificados extranjeros.
En concreto, han participado agentes de los Mossos , de las unidades de seguridad ciudadana, transporte y antidisturbios, y otros policías de la Unidad Contra Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF) de la Policía Nacional.
Atacar la reincidencia
El objetivo de este dispositivo contra la delincuencia reincidente que suele actuar habitualmente en el Metro de Barcelona busca reducir la acción de los carteristas y prevenir los hurtos y robos violentos.
Este operativo se lleva a cabo tras el aumento en un 30% de los robos violentos en Barcelona en lo que llevamos de año y cuando la consellería de Interior insiste en su petición de que se reforme el código penal para dar más herramientas para alejar a los delincuentes de los puntos en los que acostumbran a robar.