Las obras para conectar el tranvía de Barcelona por la Diagonal empezarán en 2017
Colau espera arrancar los trabajos si no hay «ningún tropiezo» y confía en tener apoyos
La conexión de los tranvías de Barcelona por la avenida Diagonal calienta motores. Después de décadas de debate sobre su unión, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau -que desde la pasada campaña electoral se ha mostrado a favor de tirar adelante este proyecto- avanzó ayer que las obras empezarán en 2017 si no hay «ningún tropiezo».
El anuncio llegó en el pleno del Pacto por la Movilidad, que analiza precisamente cuestiones de transportes e infraestructuras en Barcelona y que desde su impulso en 1988 ha vivido muchos debates sobre la interconexión de Trambaix y Trambesòs. El proyecto sobre la mesa podría tener un coste de unos 200 millones de euros.
Aunque hasta ayer no se había puesto una fecha tan concreta al proyecto, el Ayuntamiento encargó hace cuatro meses los estudios técnicos y de viabilidad de la conexión. Colau vaticinó ayer que estos informes estarán previsiblemente listos en febrero y que una vez validados se empezará a redactar el proyecto constructivo de la unión, con lo que los trabajos podrían arrancar a lo largo de 2017.
Afectaciones y accesibilidad
Los informes, que están siendo elaborados por la sociedad municipal BIM:SA, analizan aspectos de accesibilidad, topografía y afectaciones tanto para peatones como para tráfico rodado y ciclistas, así como la colocación de los raíles, la ubicación de las paradas y los planes semafóricos para conseguir que el resto del tráfico no se vea perjudicado con el nuevo transporte público. Desde el área de Movilidad espera que las obras afecte lo mínimo posible la remodelación recién estrenada en la avenida Diagonal.
Durante la reunión de ayer, la alcaldesa aseguró que el Consistorio estará preparado para tirar adelante el proyecto, aunque puntualizó que «hay que trabajar con el resto de administraciones competentes» y pidió colaboración y trabajo conjunto a los miembros del Pacto -entre los que hay ediles de la oposición y también representantes de entidades- para hacer realidad el proyecto.
Precisamente para conseguir un amplio apoyo con esta intervención, el equipo de Colau deberá trabajar con los miembros de la oposición y para ello mantendrá conversaciones con ellos, especialmente con ERC y PSC con quienes ya ha tenido alguna sesión informativa sobre la conexión.
Un 21% menos de tráfico
Durante la reunión, la alcaldesa de Barcelona también hizo público el modelo de movilidad que su gobierno quiere implantar en la ciudad y que se basa en el Plan de Movilidad Urbana 2013-2018 (PMU), que tiene entre otros objetivos una reducción del tráfico privado del 21%.
En el contexto del compromiso de Barcelona con el clima y con la lucha contra la contaminación, la alcaldesa defendió una estrategia de movilidad que se centre en dar prioridad a los modos no motorizados, especialmente a los peatones ya los ciclistas, y al transporte público. «Necesitamos más pedales y menos motores», sentenció la alcaldesa.