Colau obligará a los propietarios de los perros a llevarlos atados a partir de octubre de 2019
El gobierno municipal hará desde este septiembre una prueba piloto durante la que no habrá sanciones
Más restricciones para mejorar la convivencia de ciudadanos con perros en Barcelona. El Ayuntamiento lleva años trabajando en implantar la nueva ordenanza para los animales de la ciudad, que incluye una medida para obligar a pasear los canes siempre atados en la capital catalana . La idea, que puso sobre la mesa el anterior alcalde, Xavier Trias, no gustó a los propietarios de animales y de aquí a que una moratoria haya dejado en "stand by" el proyecto.
Tras analizar el plan en una mesa de trabajo, el consistorio liderad ahora por Ada Colau mantiene su idea aunque ha retrasado la puesta en marcha del proyecto hasta tener más áreas especiales en las que estas mascotas sí puedan campar a sus anchas . El comisionado de Ecología de Barcelona, Frederic Ximeno, ha anunciado esta semana que la obligación de pasear a los perros atados, excepto en zonas señalizadas, no entrará en vigor hasta al menos otoño de 2019 .
En todo caso, se prevé celebrar una prueba piloto previa a partir de este septiembre , durante la que no habría sanciones. Así, se abrirá "un año para analizar y evaluar la idoneidad y suficiencia de esta propuesta, para garantizar el bienestar de los animales y encontrar un marco de convivencia en la ciudad", relata Ximeno.
La intención municipal pasa porque todos los distritos dispongan de áreas de ocio para perros, más grandes que los tradicionales "pipicans". Además de estas áreas, el equipo municipal también quiere activar otros espacios de uso compartido, en los que podrán llevarse perros sin atar en horarios determinados (a primera y última hora del día, en principio).
110 áreas para perros
A día de hoy, según fuentes municipales, la ciudad dispone de 110 áreas de ocio para perros : 20 de ellas tienen de más de 700 metros cuadrados y 90 más pequeñas, que suman 45.000 metros cuadrados. Además, existen 606.500 metros cuadrados de áreas forestales.
Del centenar de parques que existen en la ciudad, la entrada de perros está permitida en 70, mientras que 30 la tienen prohibida, por su tamaño o por ser un parque temático o histórico, entre los que se ha incluido el Turó Park y los nuevos Jardins de Can Ferrer, en este caso por ser demasiado pequeño para compatibilizar usos.
Con todo, el gobierno municipal actual propone crear 89 zonas de uso compartido (ZUC), con las que se superarían 1,2 de metros cuadrados, además de Collserola y las playas fuera de temporada alta. Serían parques o plazas sin barreras , que sumarían más de 600.000 metros cuadrados.