Estos son los bienes que han declarado Colau, Valls y el resto de concejales de Barcelona
Josep Bou, el líder del PP, es el edil más rico por sus empresas y el de los comunes, el grupo con menos ediles con viviendas de propiedad
Los 41 ediles que conforman la nueva corporación municipal de Barcelona han tenido que entregar al Ayuntamiento de Barcelona una declaración de bienes y patrimonio que el propio consistorio, dentro de su portal de transparencia, ha hecho públicas y ABC ha consultado. Entre los datos presentados el pasado viernes, a las puertas de la sesión constitutiva, destaca el hecho de que 28 de ellos tienen al menos alguna vivienda de propiedad, ya sea con hipoteca pendiente o poseída a medias, y que, en total cuentan con 47 pisos, casas o propiedades rurales.
Con todo, los comunes son los que más viven de alquiler ya que de sus diez ediles solo cuatro declaran tener domicilio. Ada Colau –que dice tener en el banco cerca de 30.500 euros en tres cuentas , una de ellas compartida–, no dispone de vivienda ni tampoco de vehículo propio. Además de ella, Jordi Martí tiene el 50% de una casa rural en el Alt Empordà, Lucía Martín, varias propiedades en Lugo, de donde es originaria, mientras que Gemma Tarafa posee a medias un piso en El Masnou y Joan Subirats, también al 50%, otro en la capital catalana y una segunda residencia en Santa Perpètua de Mogoda.
Más bienes tienen los concejales de ERC. Su líder, Ernest Maragall, por ejemplo, dispone de participaciones en tres viviendas –un piso en Barcelona con hipoteca pendiente, otro en Sant Vicenç de Montalt y una casa en la Cerdaña– y además tiene unos 200.000 euros en cuentas bancarias. Su número tres, Miquel Puig, le supera, ya que tiene más de 336.000 euros almacenados , un piso y un parquing en Barcelona y además un local y terrenos agrícolas en Falset (Priorat), de donde procede. El resto de concejales republicanos tienen todos al menos una vivienda, excepto Elisenda Alamany, que solo acredita un Peugeot 108 y 7.000 euros en su cartilla.
En el PSC, también prácticamente todos sus concejales tienen cobijo de propiedad, excepto David Escudé, que tiene una Yamaha y unos 70.000 euros en varias cuentas. El líder socialista, Jaume Collboni, tiene dos pisos en la capital catalana con hipotecas por saldar de más de 411.000 euros y un parquing ya pagado, además de un coche, una moto y 5.000 euros en el banco. Montserrat Ballarín es una de las concejales con más cantidad de bienes inmuebles: cuenta con dos pisos y un parking en Barcelona (la mitad pendiente de acabar de pagar) y además tiene otras tres fincas en Graus e Isábena, en el Pirineo aragonés, de las que no es propietaria al 100%.
Valls, ni pisos ni vehículos
La declaración de Manuel Valls es una de las más sorprendentes: el exprimer ministro francés no acredita ni viviendas ni vehículos y solo tiene en sus cuentas unos 15.000 euros . Eva Parera, que junto a Valls quedará al margen de Ciudadanos tras la ruptura de esta semana en su candidatura, tiene por el contrario una hipoteca de más de 225.000 euros, una moto, acciones y más de 13.500 euros en bancos. Celestino Corbacho, que se ha pasado a los naranjas, comparte la propiedad de una casa y un apartamento con parquing y trastero en El Vendrell, un Citroen C-5 y unos 70.000 euros entre cuentas y planes de pensiones.
En JpC, su líder Joaquim Forn, encarcelado provisionalmente por el 1-O, declara tener un piso a medias, del que todavía debe 67.000 euros, y además guarda unos 17.000 euros en cuentas corrientes y casi 40.000 euros en un plan de pensiones. Su número dos, Elsa Artadi, como Valls o Colau, solo declara tener depósitos en bancos, en concreto más de 112.000 euros , pero ni pisos ni vehículos. El concejal de la formación Jordi Martí, con cuatro bienes inmuebles (tres de ellos por herencia), remarca en su declaración que también tiene el 50% de una tumba en el cementerio de Sabadell.
Josep Bou, el presidente del grupo del PP, y el único empresario, es, sin duda, uno de los más ricos en cuanto a bienes: acumula una vivienda en Cerdanyola del Vallès y tres plazas de parquing en Barcelona, además de dos empresas –la cadena de panaderías que lleva su apellido y una inmobiliaria–, con un valor que supera los 8 millones de euros. Además, tiene unos 12.000 euros en el banco y un Volkswagen Beetle.