CATALUÑA
Las escuelas catalanas deberán tener planes de convivencia
La Generalitat fomentará la creación de la figura del mediador en las aulas
Todas las escuelas públicas y concertadas de Cataluña deberán tener un plan de convivencia para frenar el acoso escolar en sus aulas, desde la guardería al bachilletaro. Los centros que todavía no cuenten con ello, tienen a partir de ahora tres años para preparar y poner en marcha un proyecto personalizado de acuerdo con sus necesidades y particularidades.
Así lo anunció ayer la consejera de Enseñanza de la Generalitat, Meritxell Ruiz, que destacó que se trata de «un paso importante» hacia la prevención de problemas como el acoso escolar y que apuntó que este instrumento tiene que ayudar a facilitar la convivencia y a dar coherencia a las acciones que se inmpulsen en clase para mejorar el clima escolar.
El plan deberá contar con tres ejes: prevención, intervención y organización. Cada centro tendrá que especificar el diagnóstico previo, unos objetivos a conseguir y también indicadores y un calendario para evaluar la correcta implantación del proyecto. Para prepararlo, el Govern pone a disposición de los directores formación e instrumentos para detectar los puntos fuertes y débiles de cada centro. Además, fomentará la creación de la figura del mediador o jefe de convivencia.
La medida no afecta a los centros privados , recordó Ruiz, que señaló que, sin embargo, éstos también tienen «una normativa que cumplir» en casos de acoso.