La equidistancia de Colau, a prueba en el pleno de este viernes
La sesión está cargada de propuestas sobre el 1-O, la DUI y el encarcelamiento de los políticos independentistas
Enésimo pleno cargado de contenido político en el Ayuntamiento de Barcelona. Un año después del 1-O y de sus secuelas, los grupos preparan para esta mañana una batería de medidas relacionadas con el conflicto , entre las que destaca la que propone la CUP para condenar el discurso de Felipe VI tras el referéndum y para exigir la abolición de la Monarquía.
La medida, similar a una que los comuns presentaron hace poco en el Parlament, obligará al gobierno de Ada Colau a mojarse aunque, a diferencia de la reciente, ésta no incorpora ninguna instancia al diálogo.
El PP, por su lado, lleva una proposición para rechazar la Declaración Unilateral de Independencia (DUI), impulsada por Carles Puigdemont mañana hace justo un año, «que supuso una fractura social y económica, dividiendo a los catalanes, y ahuyentando inversiones y creación de empleo», según recuerda el líder de la formación, Alberto Fernández. «Las rupturas no han de ser de Cataluña con España, sino con la unilateralidad que quiere impulsar el independentismo», sentencia.
Además, el PDECat pedirá que el Consistorio se pronuncie «de forma clara» a favor de la libertad de los independentistas presos y que «se acabe la persecución judicial contra los consellers, activistas y cantantes en el exilio».
ERC llevará un ruego a la alcaldesa para que asigne el nombre «U d’Octubre» a un espacio público significativo de la ciudad . Los comuns, entre quienes empiezan a haber serias tensiones por su postura sobre el independentismo, tendrán que posicionarse.