El defensor del Pueblo de Barcelona quiere saber cuánto le cuestan las estancias del Rey al Ayuntamiento
Exige más transparencia al Ayuntamiento sobre los usos y gastos que suponen las visitas de Felipe VI al Palacete Albéniz, de titularidad municipal y que sirve de residencia de la Casa Real en la capital catalana
El defensor del pueblo de Barcelona pide a Colau que habilite espacios para hacer botellón
El Síndic de Greuges de Barcelona, o lo que es lo mismo, el Defensor del Pueblo de la ciudad, ha abierto una actuación de oficio para conocer el uso del Palacete Albéniz y los gastos que tiene que asumir el presupuesto municipal por ello. La institución presidida por David Bondia quiere conocer así los costes que han supuesto para las arcas municipales las estancias de los últimos años de la Familia Real en esta finca.
Hasta ahora se sabía poco al respecto y de hecho la investigación se ha activado al conocerse la existencia de este gasto. El Palacete Albéniz, que se construyó con motivo de la Exposición Universal de 1929 , es propiedad del Ayuntamiento de Barcelona y se utiliza de manera ocasional para actos institucionales y además es la residencia del Rey en la ciudad en sus visitas oficiales , aunque el Jefe del Estado no siempre hace parada allí cuando está en la capital catalana.
A modo de ejemplo, fue utilizado el pasado abril por Don Felipe para una reunión con la Junta de Gobierno del Círculo del Liceo y meses antes, durante el último Mobile World Congress, presidió un almuerzo con los organizadores. Además, hace prácticamente un año para recibir a los premiados de 2020 y 2021 por la Fundación Princesa de Girona.
Igualmente, el Síndic lamenta que las cuentas municipales no tengan una partida concreta para conocer ni los costes por las estancias ni por el mantenimiento del recinto. En una misma línea, denuncia que el convenio existente de cesión de uso del Palacete a favor del Rey y su familia, suscrito por el Ayuntamiento y Patrimonio Nacional, no se puede consultar en el portal de transparencia municipal.
Por todo ello, la Sindicatura exige conocer el contenido del convenio de cesión de uso del Palacete, conocer el número de estancias y los gastos municipales desde 2017 por visitas de la Casa Real tanto en el Albéniz como en otras dependencias municipales y en cuántas de las ocasiones los usos han sido ciudadanos y municipales. Igualmente se quiere conocer las peticiones de uso del recinto recibidas por otras entidades ciudadanas y la respuesta municipal así como las previsiones del Ayuntamiento para abrir el espacio a la ciudadanía.
Un Síndic sin gran consenso
Bondia tomó posesión como Síndic el pasado octubre y desde el primer momento ha contado con la reticencia de buena parte de la oposición. De hecho incluso ni el PSC, socio de gobierno, lo quería como defensor pero los socialistas acabaron cediendo para desencallar el cargo, al que también concurrió un exconcejal socialista que reunía muchos más apoyos entre las entidades empresariales de la ciudad.
El actual Síndic era hasta entonces el presidente del Instituto de Derechos Humanos de Cataluña y por sus estudios y trayectoria profesional era visto por Cs, PP y Valents como un perfil muy afín a Colau y a los grupos independentistas. Quizás por eso, poco después de tomar posesión Bondia puso como jefe de su gabinete a un exconsejero de ERC en el Ayuntamiento. Su petición sobre la Casa Real apuntala ahora esta tesis.
Desde entonces ha protagonizado una sonora polémica, cuando barajó la posibilidad de que el Ayuntamiento habilite botellódromos para que los jóvenes pudieran consumir alcohol en la calle de forma controlada y que se aprovechase esos espacios para concienciar sobre los efectos de este consumo. Su propuesta causó gran indignación.