Colau, aliviada por el cese de las protestas del banco expropiado
El colectivo reitera que no renuncia a volver al local social okupado y que quieren ayudar a resolver los problemas reales del barrio
Ada Colau, respira algo más tranquila, después de dos semanas de disturbios en Barcelona. La alcaldesa ha valorado hoy positivamente que el colectivo okupa haya anunciado que dejará de manifestarse por el banco expropiado de Gracia para no perjudicar más al tejido social del barrio . “Es una muy buena señal”, que deja claro además que el conflicto no se ha hecho “crónico”, ha asegurado.
En declaraciones a Catalunya Ràdio, Colau ha destacado que el hecho de que dejen las protestas a un lado indica que los okupas “escuchan las demandas de vecinos y comerciantes” . Además, ha recordado que desde el Ayuntamiento se dijo “desde el primer día que lo que hacía falta era buscar soluciones, y que, para buscar soluciones, la condición previa era la calma y el diálogo".
Por su lado, el colectivo okupa, que ayer vio cómo los propietarios privados del local de Travessera de Gracia reforzaron el blindaje para evitar que intenten reokupar el local, ha dejado claro que no celebrarán por el momento más protestas pero que no renuncian a volver al banco y exigen que no se use al banco “como cortina de humo de los problemas reales de Gracia” y confían precisamente en que el banco expropiado sea “como una palanca para resolverlos”.
En este sentido, el colectivo ha utilizado en sus últimas horas su Twitter para lanzar mensajes en las últimas horas de denuncia de situaciones en Gracia. Que el banco expropiado “no sea una cortina de humo para no hablar de que Trias regaló 65.000 euros a Bravo Solano” (en alusión al alquiler pagado por el exalcalde) ha sido alguna de sus quejas, así como el hecho de que en la zona de los Jardinets “hay más plazas hoteleras y pisos turísticos que vecinos” o que en el barrio “hay más sitios para comprar ‘cupcakes’ que droguerías, denuncian.