Tres años de cárcel por amenazar de muerte a una pareja homosexual, ambos con discapacidad

Un juzgado de Vilanova i la Geltrú ha condenado a tres años de prisión al hombre que amenazó de muerte a una pareja homosexual en su casa del municipio. Los hechos se remontan a 2018, cuando el individuo empujó y lanzó piedras a uno de los cónyuges, cuando volvía a su domicilio. En días posteriores, se presentó en casa de las víctimas, donde arrancó los fusibles del contador de la luz, y les gritó : «Os voy a matar, os voy a cortar el cuello, maricones de mierda».

Según recoge el fallo, contra el que cabe recurso, todo comenzó el 25 de abril de aquel año, cuando una de las víctimas retiró dinero en un cajero de Vilanova, y el « acusado lo arrojó contra un muro» y le lanzó varias piedras , aunque no consiguió alcanzarlo con ninguna de ellas.

Cinco días después, de madrugada, el individuo se presentó en casa de las víctimas, volvió a lanzar piedras, esta vez contra las ventanas, y comenzó a amenazarles : «No vales ni para maricón, me cago en tus muertos. Prepárate para mañana, que vas a necesitar velas», espetó. Fue entonces cuando arrancó los fusibles.

Lo mismo repitió en días posteriores. El hombre se paseaba frente al domicilio de la pareja, y la insultaba y amenazaba por su condición sexual , según considera probado la sentencia. Una situación que generó que las víctimas, una con una discapacidad psíquica del 65%, y el otro con una discapacidad física del 34%, «una situación de nerviosismo y malestar», que les llevó a abandonar su casa.

Dos testigos corroboraron la denuncia de los afectados, y el fallo recoge que las expresiones vertidas de forma continuada y persistente, «no fueron fruto de una reacción espontánea o un momento puntual, sino con intención inequívoca de atentar contra la integridad física y la vida » de la pareja.

Por este motivo, el juzgado impone el acusado un año y medio de prisión por cada uno de los delitos de amenazas -es decir, un total de tres años de cárcel-, así como la prohibición de acercarse a menos de 500 metros de cada una de las víctimas durante dos años y seis meses. El condenado también tendrá que indemnizar a la pareja con 4.000 euros por el daño moral ocasionado, y sufragar los más de 50 euros que costó arreglar la instalación eléctrica que dañó.