Festivales de verano
Sin distancia y con 25.000 tests de antígenos diarios: así será regreso del Cruïlla al Fòrum este verano
El festival confirma que se celebrará del 8 al 10 de julio con cribados masivos diarios y mascarilla obligatoria
Test de antígenos diario para todos los asistentes, mascarilla FFP2 a recoger en la entrada del recinto y, a partir de ahí, barra libre de música en directo. Carolina Durante, Manel, Editors, Morcheeba, Two Doors Cinema Club y Sopa de Cabra, entre otros, sin limitación de movimientos ni distancia física. Así es como se celebrará en Barcelona y entre los próximos 8 y el 10 de julio el festival Cruïlla, cita que ya había avanzado su intención de celebrar este verano una edición muy parecida a la de 2019 y que ha confirmado este miércoles que sigue adelante con sus planes para acoger hasta 25.000 personas por jornada. «Podremos volver a saltar y bailar juntos de manera muy similar a como lo hacíamos antes de la pandemia», subrayan desde el festival.
Con la experiencia acumulada tras participar en la prueba piloto que reunió a 5.000 personas en el Palau Sant Jordi para asistir a un concierto de Love of Lesbian , la tutela de la Fundación Lucha Contra el Sida y el visto bueno de las consejerías de Salud, Cultura e Interior, el Cruïlla ha diseñado un plan de actuación que pasa por realizar tests de antígenos diarios a todos los asistentes antes de acceder al recinto. En un principio se estudió la posibilidad de que las pruebas pudiesen realizarse en farmacias de la ciudad, pero finalmente se centralizará todo el proceso en el CCIB, justo al lado del Fòrum.
El espacio abrirá de tres de la tarde a diez de la noche y será imprescindible reservar hora para poder realizarse el test. Además, y a diferencia de lo que ocurrió en el Sant Jordi, el coste de las pruebas tendrá que pagarse por separado: 8,5 euros para quien acuda un único día al festival y 12 y 15 euros para quienes asistan dos o tres días, respectivamente.
Una vez dentro del recinto, la libertad será casi total: la mascarilla será obligatoria, sí, pero se podrá comer y beber tanto en las zonas de restauración como fuera de ellas y no habrá que guardar distancia de seguridad. El festival también ha avanzado que devolverá el importe de las entradas a aquellas personas a las que se no se les permita el acceso por, entre otros supuestos, dar positivo en el test de antígenos, convivir con un positivo, presentar una temperatura corporal superior a 37 grados o tener un diagnóstico confirmado por SARS-CoV-2 durante las dos semanas previas al festival.
La semana pasada, el festival Canet Rock ya anunció que también celebrará su edición de este verano con 22.000 asistentes y test de antígenos, aunque al tratarse de un festival de un solo día, la operativa se antoja menos compleja que la del Cruïlla, con tres días de festival y otras tantas jornadas de cribado masivo. También el Vida Festival se mantiene en el calendario y ha anunciado que, previo test de antígenos, prevé reunir a 10.000 personas diarias entre el 1 y el 3 de julio.