Seis de cada diez embarazadas con Covid-19 grave sufre un síndrome similar a la preeclampsia
Una investigación del Hospital Vall d'Hebron describe un cuadro compatible con esta afección que es consecuencia de la infección por SARS-CoV-2 y que no requiere cesárea
Este hallazgo permitiría reducir los diagnósticos erróneos de preeclampsia en gestantes con coronavirus y evitaría partos prematuros y riesgos para la madre y el bebé
¿Sufren más preeclampsia, una complicación grave del embarazo que aparece a partir de la semana 20 de gestación y que puede poner en riesgo la vida de la madre y el bebé , las gestantes con Covid-19? ¿Es realmente preeclampsia lo que padecen estas mujeres? Un grupo de investigadores del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona ha despejado estas incógnitas y ha descrito, por primera vez en el mundo, un síndrome clínicamente similar a la preeclampsia que se manifiesta en gestantes que sufren cuadros graves de Covid-19. ¿En qué se diferencia este nuevo síndrome con la preeclampsia? La clave está en saber el origen de la infección. «Para ello deben analizarse los marcadores en sangre de la paciente», según apunta en declaraciones a ABC el investigador Manel Mendoza , responsable de la Unidad de Insuficiencia Placentaria del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona.
La preeclampsia se caracteriza por la presión arterial alta y por estar acompañada de proteína en la orina , disminución de plaquetas y elevación de los enzimas hepáticos, síntomas que también se dan a menudo en pacientes con Covid-19 . Esta complicación del embarazo no tiene tratamiento y la única opción es practicar una cesárea a la gestante y adelantar el parto.
El estudio, publicado en la revista British Journal of Obstetrics and Gynaecology (BJOG) y en el que han participado profesionales de la Unidad de Medicina Materna y Fetal, el Servicio de Bioquímica, la Unidad de Curas Intensivas Pediátricas y el Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Universitario Vall d'Hebron, señala ahora diferentes indicaciones que ayudan a distinguir entre un cuadro clásico de preeclampsia y una complicación derivada de la infección por Covid-19.
Entre los días 13 de marzo y 10 de abril de este año los investigadores del Vall d'Hebron reclutaron a 42 mujeres embarazadas de más de 20 semanas de gestación que llegaron a urgencias de este centro con infección por Covid-19 confirmada con un test PCR. Las pacientes se clasificaron en dos grupos, Covid-19 grave y no grave, según la presencia de neumonía grave, y la ecografía Doppler de las arterias uterinas y los factores angiogénicos (sFlt-1/PlGF) se evaluaron en mujeres con sospecha de preeclampsia. Estos marcadores son específicos de la preeclampsia y una alteración de sus valores indicaría que se trata de esta afección con mucha probabilidad.
Es preeclampsia si hay inflamación de la placenta
«Se trata de averiguar si la alteración de los marcadores es consecuencia de la inflamación de la planceta. Si es así, la gestante sufre preeclampsia. Si no, se trata de una complicación derivada de la infección por Covid-19», aclara Mendoza.
De los 42 casos, 34 se clasificaron como no graves y no se encontraron criterios de diagnóstico de preeclampsia . Los otro ocho casos, en cambio, fueron clasificados como graves con neumonía severa, y seis de éstos desarrollaron características propias de la preeclampsia, pero no se encontró ninguno de los marcadores específicos en cinco de estas seis pacientes.
Este hecho demuestra, según el investigador Manel Mendoza, responsable de la investigación, que los síntomas de preeclampsia de estas seis mujeres sólo eran debidos a preeclampsia en una de ellas y que, en el resto, se debían a la Covid-19.
Por tanto, el «62,5 por ciento de las mujeres embarazadas con Covid-19 severa desarrollan signos y síntomas que imitan la preeclampsia pero que se pueden distinguir de la preeclampsia real por medio de los marcadores sFlt-1/PlGF y el estudio Doppler de las arterias uterinas», afirma Mendoza.
No es necesario provocar el parto
Los casos de Covid-19 con síndrome que imita la preeclampsia se suelen resolver espontáneamente después de la recuperación de la neumonía, por lo que el síndrome en sí no sería indicación de provocar el parto de forma prematura, como estaría indicado en la preeclampsia.
De los ocho casos de embarazadas con COVID-19 clasificados como graves, seis ya han tenido a sus bebes sin problemas y las otras dos siguen con su embarazo.
Este descubrimiento «es un primer paso», según Mendoza, que prevé ampliar su estudio en colaboración con otros centros hospitalarios y de investigación.
«Me dijeron que si no mejoraba iría a la UCI»
Núria Rivera , de 37 años, es una de las gestantes que tuvo que convivir con el embarazo y la Covid-19. Se la diagnosticaron cuando estaba en la semana 27 de gestación . El día 17 de marzo, una semana antes de que estallara la punta epidémica, Núria ingresó en el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona con dificultades para respirar. Le diagnosticaron neumonía en los dos pulmones y le advirtieron de que si no mejoraba le ingresarían en la UCI. «Si con el apoyo de oxígeno no respira mejor tendremos que ingresarla en la Cuidados Intensivos», le indicaron los médicos.
En paralelo, los controles de su obstetra detectaron un crecimiento insuficiente del feto, por lo que los médicos sopesaron la posibilidad también de provocarle el parto antes de que el embarazo llegara a término. Por suerte, no fue necesario porque su evolución fue buena. «Viví momentos de mucha angustia. Estaba sola porque, al estar infectada, no podían visitarme y mi marido se quedó en casa con mis otros dos hijos», explica la paciente, que optó, según explica, «por no mirar la tele y hablar solo con el médico». En la semana 38 de gestación nació Emma, una bebé preciosa que ya se encuentra en casa con sus hermanos y su padre.
Noticias relacionadas