Santi Rodríguez - Tribuna abierta

Bajo la mesa

El papel de los dos gobiernos en la mesa, dista mucho de ser institucional, ya que cada uno va a lo suyo

Sánchez y Aragonès, con el resto de miembros que asistieron a la mesa Inés Baucells

Santi Rodríguez

Pocas veces la reunión de una mesa, que debería ser tan irrelevante como imposibles las propuestas a debatir de autodeterminación y amnistía, ha generado tanta expectación, al menos política y mediática.

Las incógnitas iniciales sobre si el presidente divo asistiría, presidiría o solo saludaría a los integrantes de la reunión, o si, mandarían a dos condenados y por lo tanto inhabilitados en representación del Govern a negociar su propia amnistía (que después de ver a la Presidenta del Parlament autoconcederse la medalla de oro del Parlament tampoco sería tan raro), o la comparación de la mesa con las negociaciones para la paz en Vietnam (muy desafortunado ejemplo), no eran más que una forma de intentar dar relevancia a un acto que no debería tenerla.

En primer lugar porque el papel de los dos gobiernos en la mesa, dista mucho de ser institucional, ya que cada uno va a lo suyo: unos a la independencia, los otros a conservar una mayoría parlamentaria. Objetivos legítimos, pero nunca gubernamen- tales, sino partidistas.

Pero también porque si tanto empeño han puesto en esta mesa, igual no es por lo que nos dejan ver encima de la misma, sino por lo que se pueda manejar por debajo y que a buen seguro no será nada en beneficio de la sociedad catalana.

Finalmente, porque se trata de una reunión de socios de gobiernos, aunque se haya celebrado en el Palau de la Generalitat, en la que su objetivo principal será alargar tanto como sea posible sus respectivos mandatos.

En definitiva una nueva oportunidad perdida para llegar a acuerdos para desencallar la necesaria inversión en el aeropuerto del Prat y en Girona, o para ofrecer soluciones a los más de 20.000 jóvenes que queriendo estudiar formación profesional, no podrán, por no haber hecho una adecuada previsión de plazas, o para terminar con los más de 1.000 barracones que suplen la falta de inversiones en escuelas, por citar solo algunos ejemplos de actualidad.

Santi Rodríguez es secretario general del PP de Cataluña

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación