Prisión para el vigilante de Tarragona que disparó a tres compañeros y un mosso
El hombre, de 45 y años y nacionalidad rumana, permanece «inconsciente» en el hospital, tras resultar herido de bala en un tiroteo con la policía
Un juzgado de Tarragona ha decretado prisión provisional, comunicada y sin fianza para el vigilante de seguridad que este martes disparó a tres compañeros de su empresa , Securitas, así como a un agente de los Mossos d'Esquadra . Dos de ellos se encuentran en estado crítico, y los restantes están graves, aunque fuera de peligro. También se encuentra hospitalizado e «inconsciente» el atacante, Martin E.S. , por lo que su traslado al penal deberá esperar a que reciba el alta.
Fueron agentes del Grupo Especial de Intervención (GEI) los que redujeron al atacante, de 45 años y nacionalidad rumana, en una masía de Riudoms, a 20 kilómetros de Tarragona, donde se había atrincherado. El hombre abrió fuego contra los policías, quienes consiguieron reducirlo tras varios disparos en las extremidades.
Por este motivo, el vigilante se encuentra ingresado en el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona y no será hasta que reciba el alta cuando ingresará en el penal de Mas d'Enric, por orden de la titular del Juzgado de Instrucción 5 de Tarragona. Fue el sindicato de agentes Uspac, personado como acusación en representación de los heridos, el que solicitó esta medida.
La causa está abierta por tentativa de homicidio, atentado a la autoridad y tenencia ilícita de armas . Y es que además de disparar contra un mosso que le dio el alto en la rotonda de Mas Pujol, otro agente sufrió una lesión en una pierna tratando de perseguirlo, según ha explicado a ABC el abogado de ambos, José Antonio Bitos.
En cuanto al tercer delito que se le imputa, Martin tiene licencia de armas por pertenecer a un club de tiro tal y como avanzó este diario, aunque de su arsenal, compuesto por tres pistolas de 9mm, una de 22mm y un rifle 308 Winchester, dicha autorización no valía para el arma larga con mira telescópica.
Licencia de armas
El atacante trabajaba para la empresa Securitas y el mismo día del suceso remitió un correo amenazante a los responsables de la empresa. Un mensaje que rezaba: «Felices fiestas, cabrones, ladrones y racistas». Junto a este, adjuntó dos fotografías con armas de fuego en ambas manos .
Según el auto, la actitud del vigilante «denota su ausencia de respeto contra la vida humana» . La juez justifica la prisión preventiva para evitar la reiteración delictiva y señala que existe el riesgo de que desee atentar de nuevo contra las víctimas. «Está claro que eran su objetivo premeditado» y que «les considera la causa de todos sus males», apunta.
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