El presidente del TSJC se zafa de las preguntas trampa de los grupos independentistas
«Mis opiniones no son de interés y no me traen aquí, por lo que no voy a contestar», asegura Barrientos en comisión parlamentaria
Compareció este jueves en el Parlamento de Cataluña el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), Jesús María Barrientos, sin caer en las trampas diálecticas que los representantes de JpC, ERC y la CUP le prepararon, solo tres días después de presidir el tribunal que juzga al presidente de la Generalitat, Quim Torra, por un posible delito de desobediencia. Barrientos se ciñó a la memoria del curso judicial 2018, motivo por el que acudió en un formato informativo a la Comisión de Justicia .
Pese a que Eusebi Campdepadrós (JpC), Jordi Orobitg (ERC) y Vidal Aragonés (CUP) utilizaron gran parte del tiempo de sus intervenciones para atacar a Barrientos, el presidente del TSJC se limitó a responder por el motivo que le llevó al Parlamento autonómico. «Mis opiniones no son de interés y no me traen aquí, por lo que no voy a contestar a esas consideraciones» y «mi comparecencia no me obliga a nada más», fueron sus contestaciones ante la insistencia de los grupos independentistas, que aprovecharon la sesión para defender la existencia de «presos políticos» y a criticar el delito de sedición, que es el atribuido a los líderes del 1-O en la sentencia del Supremo por el procés.
Desde el primer momento, Carmen de Rivera (Cs), presidenta en funciones de la Comisión, marcó el listón a los intervinientes, para que no se desviaran del tema del orden del día. Así, sorprendió la contundencia que adoptó, incluso, con su compañera de filas María Valle, a la que advirtió con llamarla al orden. Pero no evitó que, al final, hubiera intervenciones al margen del motivo de la comparecencia.
El representante de la CUP se mostró muy duro en las formas con Barrientos, le reprochó que hace un año y medio abandonase un acto porque se defendió la existencia de «presos políticos» y criticó que, en su opinión, Barrientos no respondiera a las preguntas. Orobitg le afeó la decisión que, en calidad de presidente del TSJC, adoptó en plena efervescencia del procés cuando pidió a la Policía Nacional reforzar la seguridad del TSJC , una misión que le corresponde a los Mossos d’Esquadra.
Pero el momento de mayor tensión en la Comisión se vivió cuando De Rivera le pidió a Campdepadrós que se ciñera al contenido de la memoria y dejase de lamentar la existencia del delito de sedición en el Código Penal y que este haya sido el que condenó a los líderes del procés. Tras la advertencia, los miembros de JpC en la Comisión dejaron la sala y se quedó solo Campdepadrós.
Barrientos demandó más recursos económicos y mejoras para la Justicia en Cataluña y señaló que los 821 jueces y magistrados en la región soportan un incremento del 10 por ciento de «asuntos ingresados» en los dos últimos años.