Daniel Tercero - TRIBUNA ABIERTA
El porqué del PSC
El PSOE (y con este el PSC) tiene que escoger entre la derecha del PP o la (rancia) derecha periférica de Convergència y PNV
La aritmética parlamentaria surgida tras las elecciones generales del 26J dejó al PSOE como (único) árbitro para formar el próximo gobierno o para determinar si los españoles acudiremos a las terceras elecciones generales en un año.
No hay combinaciones reales que no pasen por una decisión del PSOE. Veamos. La primera opción (y menos valorada, pero vista con perspectiva la más sensata) es la de la gran coalición PP-PSOE (222 votos a favor en el Congreso); tras esta opción, la de la coalición PP-C’s (169 escaños), que necesita al menos la abstención del PSOE; y por último, una coalición PSOE-Podemos (156 escaños), a la que hay que sumar, como mínimo, a ERC, Convergència o PNV (a escoger dos de estos tres) y que EH-Bildu y CC colaboren.
Así las cosas, el PSOE (y con este el PSC) tiene que escoger entre la derecha del PP o la (rancia) derecha periférica de Convergència y PNV. La formación de Carles Puigdemont está en su etapa más separatista y la de Iñigo Urkullu en su periodo más aproximativo a EH-Bildu desde Ibarretxe.
Parece que en el PSOE intentarán explicar su abstención a un gobierno del PP. Una abstención que llamarán “técnica” para que España tenga gobierno tras 300 días de Ejecutivo en funciones y el PSOE gane tiempo para reconstituirse. Sin embargo, en el PSC aseguran (por lo Parlon y por lo Iceta) que votarán “no” al candidato llamado Mariano Rajoy.
Lo que no se entiende es que, para los socialistas catalanes, Convergència sea (y haya sido) una opción de gobierno mientras al PP le cierran todas las puertas. ¿Recuerdan quienes fueron los socios del presidente de la Generalidad que sustituyó a José Montilla en 2010? El PSC (socios) y Artur Mas (sustituto). Pero, claro, entonces, Convergència no era independentista.