Los piquetes bloquean la entrada de camiones al Puerto de Barcelona
Nueva jornada de protestas del sector del transporte por el alza del precio de los carburantes
La actividad del Puerto de Barcelona se ha visto afectada durante este martes debido a la huelga de los transportistas por la subida de precio de los carburantes. Medio centenar de camioneros integrando un piquete han impedido la entrada normal de camiones a las instalaciones portuarias con la intención de sumar a más camioneros al parón.
La mayoría de los vehículos que han intentado acceder han terminado dando la vuelta con tal de evitar confrontaciones , lo que ha provocado que la actividad del puerto se viera perjudicada . Para intentar normalizar los accesos se han desplazado a la zona miembros de la Guardia Civil y de los Mossos d’Esquadra.
Los piquetes se han situado a primera hora del día en la zona de entrada de los contenedores y han impedido el paso habitual de los camiones a lo largo de la mañana. El número de huelguistas ha ido en descenso con el paso de las horas y los vehículos han podido acceder al puerto con menos problemas. Aun así, el tráfico en las instalaciones es menor a lo usual porque las jornadas de protestas ya han reducido de principio la llegada de camiones.
Tras nueve días de huelga el problema persiste, ya que la Plataforma por la Defensa del Transporte de Mercancías, organización convocante del parón, ve insuficientes las medidas que este lunes aprobó el Gobierno. El Ejecutivo de Pedro Sánchez después de reunirse con el Comité Nacional de Transporte por Carretera, se comprometió a dar 500 millones de euros en ayudas directas al sector a partir del 1 de abril.
El parón del transporte empieza a preocupar a algunas grandes empresas como Danone o Heineken. Los problemas a la hora de distribuir los productos conllevarán que algunos suministros dejen de llegar a la restauración y a otras superficies comerciales . Un sector alimenticio que se ve abocado a tener problemas de abastecimiento, tal como advirtieron desde Mercabarna ante la falta de producto fresco que se prevé si se alarga el conflicto.
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