Teresa Giménez-Barbat - Agenda Europea
Una perfecta pesadilla
Una de las lecciones que sacaremos de esta historia es que la impunidad, el dejarles pasar sus despotismos les ha envalentonado hasta el delirio
Lo que una parte de la ciudadanía catalana ha perpetrado contra la otra no tiene nombre ni perdón. La falta de respeto, el desprecio y el abuso se encontró hasta ahora con una educada paciencia cada vez más erosionada por las vueltas de tuerca de sus atropellos.
Una de las lecciones que sacaremos de esta historia es que la impunidad, el dejarles pasar sus despotismos les ha envalentonado hasta el delirio. Les hemos alimentado con nuestros complejos e inseguridades. Y ahora se filtra este documento que expresa crudamente lo que cocinan como final solución al problema de los "unionistas" (hubo una época que calificativos tan positivos como estos nos daban vergüenza). Porque su gran descubrimiento es que somos muchos y muy resistentes. Poco a poco caen del guindo del que se agarran por la cola de sus estupendas nóminas y privilegios. Nosotros mismos estamos sorprendidos, no de que haya habido un crecimiento del electorado secesionista, sino de que no lo seamos todos.
Si con treinta años de bombardearnos por tele, escuela y aire aún no nos han convencido, es que sus ensoñaciones son un insulto a la inteligencia más promedio y a la más mínima noción de ciudadanía y modernidad (¡Ellos, que se creían daneses y han resultado ser peores que bananeros!). La Cataluña independiente que nos preparan, con su prensa amordazada que no hará falta seguir comprando, con un president de la Generalitat que designaría a dedo al del Tribunal Supremo, con una amnistía automática para los golpistas de antes y después del delito, comprensiva con los corruptos del régimen pujolista, es una perfecta pesadilla. Ese texto infame es la descripción de una dictadura. Todo eso por no plantarles cara hace treinta años.
Teresa Giménez-Barbat es eurodiputada del grupo ALDE.