La política útil

Ejercer la política en estos tiempos no es fácil, y ejercerla de forma útil siendo un grupo pequeño en la oposición, menos. Pero en su día, ya demostramos que tres podían ser más poderosos que cincuenta. Esta mentalidad de ser útiles es la que nos guía en cada una de nuestras propuestas y en cada uno de nuestros votos y, pasados los primeros seis meses de legislatura, creo que podemos decir con orgullo que lo hemos conseguido en más de una ocasión.

Barcelona pel Canvi (BpC) ha logrado desde el pasado mes de octubre que se apruebe un total de 15 proposiciones y ruegos en el Ayuntamiento de Barcelona. Son propuestas encaminadas a mejorar la vida de los ciudadanos, canalizadas a través de un eje social, el fomento de la economía, la cultura y el buen gobierno.

Hemos arrancado el compromiso por parte del gobierno del Ayuntamiento de trabajar codo con codo con las empresas del tercer sector para ofrecer una mejor atención a aquellas personas con riesgo de exclusión social, especialmente a aquellas personas mayores que viven solas y que merecen ser atendidas y acompañadas. Hemos insistido con las nuevas tecnologías y el apoyo a las start ups, en extender el wi-fi en los transportes públicos y en reabrir el estratégico tema de la cocapitalidad de Barcelona, tan importante para el resurgir económico, cultural y social de Barcelona. Hemos conseguido mayores excepciones en el uso del vehículo en la ordenanza de ZBE, una rebaja sustanciosa de las sanciones, así como que se abra la puerta a la revisión de los niveles reales de contaminación de los coches afectados. Sin embargo, todavía nos queda mucho por hacer.

Desde BpC hemos dicho no al presupuesto 2020 al que le sobran cargas impositivas e ideología, y le falta ambición. Seguiremos peleando por la becas Erasmus, y por las ayudas económicas para las familias que se han visto obligadas a acudir a la guardería privada por falta de plazas públicas. Seguiremos insistiendo en la derogación de la normativa absurda del 30 por ciento en vivienda, y proponiendo medidas efectivas que permitan mayor oferta de vivienda social. Y seguiremos trabajando por una capital que no cierre sus puertas al mundo a causa de la ideología de quien la gobierna. El veto al museo Hermitage es un claro ejemplo de ello.

Ejercer la oposición responsable conlleva mantenerse firme en aquellas propuestas que creemos necesarias, apoyar aquellas que supongan un beneficio para los ciudadanos y la ciudad -provengan de quien provengan- y confrontar aquellas que, a nuestro entender, empequeñecen la ciudad o perjudican a los barceloneses.

Eva Parera es concejal de Barcelona pel Canvi