Eva Parera - Tribuna abierta
Imprescindible bajar impuestos
Bajar impuestos no es una política «de derechas» o «liberal»; es una política útil, que está demostrando en otras ciudades que se puede hacer y acabar aumentando la recaudación
Desde que hace un año el coronavirus entrara a formar parte de nuestras vidas, el sector de la restauración ha sufrido y sigue sufriendo múltiples restricciones. Primero fue el estado de alarma decretado por el Gobierno, y después las medidas impuestas por la Generalitat, que a día de hoy siguen vigentes. Y uno se pregunta: ¿algún estudio científico ha demostrado que los bares y restaurantes de nuestras ciudades sean focos de contagio? Y la respuesta la sabemos: ninguno. Ante esta situación, lo lógico sería apoyar a este sector a través de ayudas directas y la reducción de impuestos y tasas. En Barcelona algo se ha hecho ya, pero resulta insuficiente teniendo en cuenta que en las Ordenanzas Fiscales de 2020 en algunas zonas se incrementó la Tasa de Terrazas entre un 100% y un 300% respecto al año anterior.
Algunos dirán que no se puede bajar impuestos porque la crisis que vivimos requiere recursos públicos, o que bajarlos genera pobreza. Nosotros les decimos que es imprescindible bajar impuestos para reactivar la economía, y que esta reactivación será la que hará posible una mayor recaudación. Corremos el riesgo que por no bajarlos algunos negocios ya no los paguen nunca más; habrán cerrado.
El gobierno municipal nos dijo ayer que no era posible bonificar al 100% la tasa de terrazas. Para ellos, con las ayudas directas es suficiente; pero lo que no cuentan es que las ayudas no llegan y cuando lo hacen puede ser demasiado tarde para el sector, ya que como apunta el Gremio de Restauración un 50% de los establecimientos puede acabar cerrando definitivamente. La propuesta que presentamos era sencilla y suponía un alivio directo para muchos negocios: pasar del 75% al 100% de bonificación en la tasa de terrazas. Los restauradores necesitan algo más que buenas palabras.
Bajar impuestos no es una política «de derechas» o «liberal»; es una política útil, que está demostrando en otras ciudades que se puede hacer y acabar aumentando la recaudación.