Santi Rodríguez - Tribuna Abierta
Oportunidad para superar el engaño
Debemos aprovechar la oportunidad de estas elecciones para apostar por la reconciliación entre familias, entre catalanes, y entre catalanes y españoles
Que sí una declaración retórica, que la independencia no estaba preparada, que hay otras soluciones que no sean la independencia, y otras, hasta hace poco, inimaginables excusas están entre los titulares de numerosos medios por boca de los líderes del «procés» en distintos destinos para mayor desconcierto. Algunos siguen pensando que su papel en la historia es más de mártires que no de traidores.
Me puedo imaginar qué deben estar pensando muchos catalanes que por convencimiento o ilusión creyeron que esto de la independencia de Cataluña era posible. Algunos hemos repetido incesantemente que todo era un gran engaño, que cuidado con la ilusión porque en realidad se trataba de ilusionismo.
Ahora bien, las consecuencias del engaño ni son retóricas ni son ilusionismo, son reales. La tensión política se ha ido convirtiendo en tensión social, se negó que el independentismo afectara incluso a las relaciones familiares, como se negó que la hipotética independencia fuera a tener ninguna repercusión negativa en la economía, ni en la calidad de vida de los catalanes.
Ahora, los catalanes tenemos la oportunidad de superar el engaño. Ante tantos despropósitos, el presidente Mariano Rajoy destituyó todo el Govern y convocó elecciones para que los catalanes decidamos. Sí, para que ejerzamos el auténtico derecho a decidir.
Debemos aprovechar la oportunidad de estas elecciones para apostar por la reconciliación entre familias, entre catalanes, y entre catalanes y españoles. Cualquier proyecto vital de futuro requiere paz social y unidad. Que nadie interprete que unidad puede significar uniformidad, eso lo dejamos para los independentistas resilientes. La riqueza de cualquier sociedad, también la catalana, se basa en la pluralidad, en la diversidad y en la comprensión y tolerancia: son las claves del progreso de las sociedades modernas.
Las elecciones catalanas nos dan también la oportunidad de elegir entre incertidumbre y estabilidad con todas sus consecuencias. La incertidumbre aleja empresas, inversiones, actividad económica, puestos de trabajo y termina llevando a la pobreza; es imprescindible apostar por la estabilidad, la recuperación de empresas, de inversiones, de puestos de trabajo y, sobre todo, de prosperidad para el conjunto de la sociedad, máxime cuando la reciente crisis económica, que ya habíamos dejado atrás, ha causado tantos daños a tantas personas y a tantas familias.
También desde el punto de vista institucional debemos recuperar la normalidad, y que los catalanes podamos tener un Govern de la Generalitat leal con los catalanes, y ocupado en los problemas quizás menos épicos pero más importantes como son la sanidad, la educación o las atenciones sociales.
Los catalanes tenemos, nuevamente, la responsabilidad de decidir entre lío o progreso. Nosotros, sin duda, apostamos por el progreso.
Santi Rodríguez es secretario general del PPC.
