Campo apunta que la lentitud de la Justicia fomenta la pena de telediario
El exministro de Justicia abogan por aumentar la transparencia de la administración para evitar condenas sin sentencia por informaciones periodísticas

El expresidente del F.C. Barcelona Sandro Rosell se enteró de su detención por la radio . Se encontraba en su casa cuando, pasado un rato, le llamó un amigo: «¡Oye, que estás detenido!». El anuncio se materializó poco después, pero tal y como recuerda su abogado, Pau Molins, « llegaron antes las cámaras de televisión» que los policías que por orden de la juez Lamela fueron a arrestarlo .
Pasó 643 días en prisión preventiva antes de que la Audiencia Nacional lo absolviese de los cargos que pesaban sobre él , presuntos delitos de blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal. Pero, tal y como recuerda su letrado, Rosell, además de pasar casi dos años entre rejas, cargó con la llamada 'pena de telediario', una condena sin sentencia , que acaba con la presunción de inocencia de los investigados. Entre sus causas, la lentitud de la Justicia, según han apuntado este martes el exministro del ramo Juan Carlos Campo y Neus Pujal, Fiscal jefe del Área de Sabadell.
Durante un coloquio en el Círculo Ecuestre de Barcelona, Pujal y Campo -que es magistrado- han coincidido en la necesidad de aumentar la transparencia de los canales oficiales, es decir, la comunicación de jueces y fiscales, para contrarrestar los juicios paralelos . El primero ha aludido al «modelo holandés» del juez comunicador que fomenta «la cercanía con la ciudadanía», mientras la segunda ha puesto dos ejemplos: las ruedas de prensa que concedieron dos representantes del Ministerio público tras sendas tragedias: la del accidente del vuelo de Germanwings en 2015, y la de los atentados de París, en noviembre del mismo año .
«En ambos casos, dieron información veraz, objetiva, rigurosa y respetuosa con la presunción de inocencia», ha indicado Pujal, quien señala como difusores de la llamada 'pena de telediario' tanto a las redes sociales como a «periodistas no serios». A esta expansión contribuye «la lentitud judicial», es decir, el tiempo que transcurre entre la instrucción y la sentencia, o la resolución del posterior recurso interpuesto .
Condenas sin sentencia
Por su parte, el penalista Molins ha recordado que las condenas sin sentencia suponen la transgresión de un derecho fundamental: el de la presunción de inocencia . Además del calvario por el que atravesó Rosell, ha recordado el que sentó a la Infanta Cristina en el banquillo, el caso 'Nóos'. «La habían condenado antes de comenzar el juicio. Parecía que era necesario para que nadie pudiese decir que la Justicia no es igual para todos, pero fue injusto», ha reprochado.
Al respecto, el letrado ha indicado que el problema no lo genera la prensa, sino quien filtra la información. «El fiscal, el juez instructor, o la policía judicial».