Josep Bou - Tribuna abierta
Colau se quedó sin ética
«Dar subvenciones a dedo, dinero a entidades afines y contratar a doce familiares en el Ayuntamiento es éticamente muy reprobable»
El próximo 4 de marzo, la alcaldesa Colau va a declarar ante el juez por presunta malversación y prevaricación. Ella se ha cansado de repetir que va a quedar en nada y que no hay causa. Debe tener una varita mágica o mucha confianza en el juez, pero más allá de si es culpable o no, ¿ha pensado en qué lugar está dejando el nombre de Barcelona? Lo que sí puedo afirmar, sin miedo a equivocarme, es que éticamente Colau ha fracasado.
Dar subvenciones a dedo, dinero a entidades afines y contratar a doce familiares en el Ayuntamiento (incluida la pareja de una concejal) es éticamente muy reprobable. ¿Se imaginan que esto lo hace un alcalde del PP o de cualquier otro partido? Tiene que dimitir al día siguiente. Los escraches de Colau y los suyos serían de récord Guinness.
Colau ha perdido una batalla de la que ella siempre ha hecho bandera. Ellos eran los que iban a cambiar la política, los que iban a echar a la casta y al final se han convertido en una caricatura de lo que criticaban. Igual que prometía acabar con el problema de la vivienda en Barcelona, y lejos de mejorarlo, lo ha empeorado. Igual que prometía acabar con los desahucios, y Barcelona es la ciudad con más desahucios del Estado. Lo único que le ha salido bien es tener la ciudad llena de okupas, que era lo que ella quería para contentar a sus amigos de antaño.
Y así nos va en Barcelona, la ciudad sin ley, la ciudad de los 250 delitos al día, la ciudad con el presupuesto más alto de toda la historia, pero con los vecinos pagando los impuestos más elevados de los últimos tiempos. En vez de gestionar la postpandemia, la crisis social y económica que tenemos encima, e incluso de frenar la pérdida de oportunidades constante de Barcelona, Colau ha decidido acabar su segundo (y último) mandato regalándonos un suspenso total en ética. Un signo más de la decadencia de Barcelona.
Josep Bou es presidente del PP en el Ayuntamiento de Barcelona