¿El cuarto querer y no poder?

El desaparecido humorista gráfico José María González, más conocido por el seudónimo Chumy Chúmez, publicó hace 50 años una viñeta en el Diario de Madrid en la que dibujaba a dos hombres que se cuestionaban si la prensa era el cuarto poder o en realidad se quedaba en una voluntad fallida, en el mero querer y no poder. La duda de aquella viñeta persiste, pero ahora con mayor fuerza por la pérdida de prestigio de la profesión a consecuencia del exceso de proximidad con los poderosos, en especial de los desacreditados políticos. Caímos en el periodismo declarativo y muchos olvidaron los hechos, por no hablar de poner luz a lo que se oculta y de la dejación del periodismo de investigación.

Nadie es lo que dice, sobre todo si es político en campaña. Uno empieza a ser lo que hace; pero lo que completa a uno es lo que oculta. Muchos periodistas nos entregamos al juego declarativo. En ese ámbito de confort, abandonamos escrutar lo que en realidad hacen los poderosos para ponerlo en contraste con lo que dicen. En este estado de la profesión, la XVII Jornada que hoy organiza la Asociación de Periodistas Europeos en Madrid con el patrocinio de Coca Cola, pretende analizar el rol a desempeñar por la profesión y su relación con la política, a partir de responder a la pregunta de si el periodismo debe ser ariete de las libertades o mero taquígrafo de la realidad.

¿Qué influencia ejerce hoy el periodismo en un mundo en el que la comunicación se realiza por medio de nuevas vías carentes del necesario filtro de la verificación o la mera jerarquización que aportan los profesionales? ¿Cómo vencer la desafección de la juventud y la sociedad entera en un escenario en el que la sostenibilidad pasa por el cobro por las informaciones? ¿Cómo recuperar la función de cuarto poder en el siglo XXI del Twitter e Instagram? ¿Se puede extrapolar el modelo de la radio para captar el interés de una juventud infotoxicada y carente de contrastes verificadores?

Quien suscribe estas líneas tenía billetes para viajar a la capital y asistir a esta jornada que clausurará Iván Redondo, jefe del Gabinete del presidente del Gobierno en funciones. Pero el poder tumultuario barcelonés le ha dejado en la viñeta de Chumy Chúmez.