La burbuja y los jóvenes

El sector inmobiliario de Cataluña es uno de los más vivos y dinámicos del país tanto por volumen y cantidad de operaciones como por su poder de atracción de inversiones inmobiliarias de todo el mundo. El análisis del mercado es complejo, pues se están dando fenómenos que no son ni homogéneos ni extrapolables a todo el territorio. Tradicionalmente el mercado ha evolucionado extendiéndose desde los centros de las grandes ciudades hacia el extrarradio. Así pues, era en las grandes ciudades donde se daban las principales subidas mientras luego ese fenómeno se extendía a las áreas metropolitanas.

En periodos de recesión sucedía el fenómeno opuesto, primero se registraba una caída en precios y ventas en localidades periféricas y luego afectaba, normalmente en menor medida, a las grandes ciudades. Hoy estamos ante un escenario diferente, pues los APIs catalanes estamos constatando que las ciudades de la periferia experimentan subidas interanuales en sus precios por encima de lo que lo hacen en algunas zonas de las capitales catalanas. De cara a los dos próximos años, las ciudades metropolitanas aún tienen recorrido en el incremento de sus precios, recogiendo un fenómeno de atracción del consumidor desde las grandes ciudades hacia poblaciones próximas con precios mucho más competitivos. Mientras, en las capitales, los precios se mantendrán estables por la presencia de demanda extranjera e inversora y su peso en el número de transacciones.

En este sentido, esta moderación de los precios descarta la posibilidad de lo que algunos acuñan como “burbuja”, pues no se están dando ninguno de los fenómenos que representan una amenaza para la estabilidad del sector. Además, es de destacar la tendencia de las grandes promotoras a orientar sus activos hacia el alquiler precisamente por la distancia entre los precios y el poder adquisitivo de los consumidores en el centro de las grandes ciudades. Las perspectivas de futuro son muy interesantes para el sector. Si bien los inversores han sido artífices durante los años 2017 y 2018 de la reactivación del mercado, suponiendo un porcentaje de operaciones muy importante y sin necesidad de financiación, próximamente serán los jóvenes los que tendrán un papel decisivo dentro del mercado.

Descartado el fenómeno ‘burbuja’, las grandes amenazas del sector en los próximos años dependerán de la evolución económica global y de la inestabilidad política, que retrasan la toma de decisiones importantes a nivel económico. Por otra parte, la principal fortaleza de nuestro sector vendrá determinada por la necesidad de vivienda en nuestro país y del atractivo turístico y de inversión del mercado catalán. Estos factores, unidos a la necesidad de la banca de aumentar su volumen de negocio y de concesión de crédito en los próximos años, serán elementos dinamizadores de un mercado muy vivo y que seguirá teniendo en Catalunya uno de los principales motores económicos del real estate español.

Gerard Duelo es presidente de la AIC y del Colegio de Agentes Inmobiliarios de Barcelona (COAPI)