Cataluña creará comités en todos los colegios para controlar el uso del catalán de profesores y alumnos
El consejero de Educación pide «rebelarse» contra las decisiones judiciales que dañan la primacía del catalán en los colegios
El gobierno catalán ha emprendido una ofensiva para ‘salvar el catalán’ . De hecho, esta cuestión ha pasado en pocas semanas de ocupar un espacio casi residual en la agenda del ejecutivo a centrar buena parte de sus intervenciones. En esta línea, hoy la Generalitat ha presentado un informe en el que pone negro sobre blanco datos que vendrían a justificar un plan de choque para «blindar» la lengua catalana con la implicación de todos los estamentos del ejecutivo autonómico. El primer objetivo es el Departamento de Educación.
Según un estudio expuesto hoy en rueda de prensa por los consejeros catalanes de Educación y de Cultura, Josep Gonzàlez-Cambray y Natàlia Garriga, la preeminencia del catalán como lengua principal en la educación ha caído drásticamente desde 2006. En el caso de su uso por parte de los docentes, ha pasado de usarse «siempre o casi siempre» para hablar a los alumnos en el 63% de los casos al 46% actual. Paralelamente, también ha disminuido el uso entre los estudiantes. Así, mientras que el catalán era la lengua habitual del 67% ellos en 2006 cuando hacían actividades en grupo, ahora lo es para el 20%. El estudio se realizó en medio centenar de centros de ESO.
La intención del Govern es frenar este retroceso creando «grupos impulsores» del catalán en doscientos centros catalanes. En cuatro años, quieren que estos comités formados por profesores y expertos lleguen a todos los centros de la comunidad. «Cada grupo impulsor deberá analizar el contexto lingüístico y los usos lingüísticos del centro, identificar los elementos de mejora y establecer objetivos, calendarios e instrumentos de evaluación», ha detallado hoy Gonzàlez-Cambray antes de resaltar que estos grupos tendrán potestad para proponer la revisión del proyecto lingüístico del centro.
«El modelo catalán de la política lingüística necesita una revisión a fondo» , ha alertado por su parte la consejera Garriga. Su objetivo es, además, que en los próximos meses todos los departamentos de la Generalitat evaluen el uso y la presencia del catalán en sus respectivos ámbitos, de la salud a la justicia, pasando por la seguridad o la relación con la administración. Para el Govern, la promoción del uso del catalán en los centros educativos va a ser una acción prioritaria «de país» a partir de ahora. De hecho, Gonzàlez-Cambray incluso ha llamado a «rebelarse» contra las decisiones judiciales que en los últimos tiempos han laminado la primacía de la lengua catalana en los colegios e institutos de la comunidad. «Basta ya» , ha exclamado aseverando que el responsable de dictar el modelo educativo de la comunidad es el gobierno autonómico, no los tribunales.
Preguntados por si los centros podrán elegir adherirse, o no, al plan para crear comités que controlen y fomenten el uso del catalán, desde la Generalitat avisan que este será totalmente obligatorio para todos los centros públicos y concentrados. «No es voluntario, todos los centros educativos tendrán que incorporarse a este plan, es una política educativa de país», ha recordado el consejero de Educación. Asimismo, ha detallado que también se quiere involucrar a las familias, realizando actividades de promoción de la lengua catalana con fondos públicos. En el caso de los centros de infantil, se trabajará un plan aparte. «De acuerdo con este plan, todo el profesorado, todos los maestros, de todos los centros educativos del país, deberán formarse para disponer de todas las herramientas para hacer un uso del catalán en su escuela, su instituto, en su día a día dentro de cada una de las 72.000 aulas del país », ha resumido el responsable de Educación.
Desde las organizaciones contrarias al modelo actual de inmersión lingüística ya se ha lanzado un grito de alerta. La Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB) ha recibido con críticas el nuevo plan del Govern. «El plan se basa en formar a más inquisidores de la lengua. No permaneceremos callados ante el aumento de las presiones a alumnos y profesores. Cataluña es bilingüe y su escuela ha de serlo. No le llamen cohesión ni multiculturalidad, es monolingüismo», ha señalado la entidad en un mensaje en sus redes sociales poco después de darse a conocer las intenciones del Govern.