La feminidad japonesa enamora en la Fundación Miró
El centro explora la influencia nipona en Miró a partir de medio centenar de grabados de Itó Shinsui
El retrato de Miró a Enric Cristòfol Ricart da la bienvenida a la muestra de grabados «Itó Shinsui. Tradición y modernidad», que ocupa la sala octogonal de la Fundación Miró. Esta exposición es un nuevo proyecto que nace de la estrecha relación entre la fundación y Kazumasa Katsuta, el coleccionista privado de Joan Miró más importante de Japón y uno de los principales de todo el mundo. Rosa Maria Malet, exdirectora de la pinacoteca, apunta a algunos de los periodistas que «una parte importante de los fondos de Katsuta se exponen permanentemente en la Fundación en una sala que recibe el nombre de “La mirada del coleccionista”».
Tras aclarar este vínculo, volvemos al cuadro que preside la sala octogonal. «Hemos pedido al MOMA de Nueva York este cuadro porque además del retrato de Ricart, Miró eligió una estampa oriental que pegó en el lienzo convirtiendo la obra en un collage», apunta Marko Daniel, nuevo director del museo. Los cincuenta grabados sobre madera que podemos disfrutar en Montjuic pertenecen al periodo 1916-1964 y están divididos en dos temáticas: el retrato tradicional femenino y lo paisajes idílicos.
«La pieza “Delante del espejo” está considerada una de sus mejores obras y más populares», explica Marco mientras recuerda que la admiración por las técnicas del grabado en madera japonés llevó a Miró a aplicarlas a menudo en su obra gráfica. Esta muestra pretende sensibilizar a la gente con las técnicas de grabado y por ello incluye una vitrina con un juego completo de herramientas para tallar las planchas de madera. También podemos admirar una serie de bocetos para «Linterna de papel al estilo Gifu» (1930) y la colección con las treinta fases de estampación de «El cabello» (1952).
Marco insiste en la importancia de este artista porque supo utilizar las técnicas antiguas para representar a mujeres del siglo XX: «Shinsui fue uno de los principales responsables del resurgimiento y se puso al frente de la corriente de arte gráfico Shin hanga». Su nieta de Akika Katsuta que visita estos días Barcelona es la comisaria de esta selecta muestra