Explosión en Tarragona
La «bola de fuego» que voló tres kilómetros y mató a Sergio en su propia casa
La tragedia se cebó también con los trabajadores de la empresa química
Lo definía el alcalde de Tarragona, Pau Ricomà . Una explicación «casi inverosímil», pero que se antoja como la «hipótesis más probable» con la que trabajan los investigadores: una chapa de hierro de una tonelada del reactor que explosionó en la empresa química IQOXE de Tarragona voló unos tres kilómetros hasta entrar por la ventana de un piso del edificio del barrio de Torreforta de Tarragona; hizo desplomarse el suelo de la vivienda y mató al vecino del segundo. Su mujer, por suerte, no estaba en esos momentos en casa.
La víctima era Sergio Millán , de 59 años, muy conocido en el barrio por haber regentado hasta no hace mucho una frutería. «Era un hombre bueno y trabajador», coincidieron en señalar varios vecinos consultados. Otros dos hermanos de la víctima tenían también sendas fruterías en Torreforta, un negocio familiar.
No se hablaba de otra cosa ayer por la mañana en el barrio, y todas las miradas de vecinos y curiosos se dirigían hacia aquella ventana destrozada del tercer piso de la fachada trasera del número 7 de la plaza García Lorca. Un dron de los Mossos d’Esquadra sobrevolaba el lugar en busca de explicaciones científicas del siniestro. En el interior de la vivienda aun permanecía la pesada pieza metálica de un metro y sesenta centímetros de largo que supuestamente se había desprendido con la explosión de una empresa situada a casi tres kilómetros. «Era como una bola de fuego» , coincidieron en señalar varios vecinos a este diario.
Sergio Millán no fue, lamentablemente, la única víctima. Y es que la tragedia se cebó con los trabajadores de la empresa química, donde en aquel momento operaban unos 25 de los 120 operarios que tiene la plantilla. Dos heridos con quemaduras muy graves fueron trasladados el martes por la noche en helicóptero hasta el hospital Vall d’Hebron de Barcelona. Uno de ellos murió la tarde de ayer a consecuencia de las graves heridas que padecía. Tenía el ochenta por ciento del cuerpo quemado.
Habían sido los mismos trabajadores quienes tras la explosión alertaron de que uno de sus compañeros había desaparecido. La mañana de ayer se confirmó la peor noticia , cuando los bomberos hallaron su cuerpo calcinado. Era el jefe de turno de la planta donde se produjo la explosión y posterior incendio, según informaron fuentes sindicales. Los dos trabajadores fallecidos y el herido que, al cierre de esta edición, permanecía ingresado en estado muy grave, comparten nombre. Los tres se llaman Óscar. Los otros cinco heridos en el accidente sufrieron lesiones leves y tres de ellos fueron dados de alta el mismo martes.
