Detenido un monje del monasterio de Poblet por tocamientos a una niña
La comunidad aparta al detenido pero considera que se trata de una confusión y un exceso de celo del denunciante
Los Mossos d'Esquadra detuvieron el pasado miércoles a un monje del monasterio de Poblet (Tarragona) acusado de practicar tocamientos a una menor.
Según ha comunicado el mismo abad, Octavi Vilà, y de acuerdo con el Consejo del Monasterio, la comunidad, ha acordado la «prohibición cautelar al monje de ejercer de ahora en adelante sus derechos capitulares, de realizar cualquier actividad pastoral y de abandonar la clausura». El monje detenido , tras pasar unas horas en comisaria, ha quedado en libertad con cargos y a disposición del juzgado de Valls (Tarragona). En un comunicado, el Tribunal Superior de Justícia de Cataluña ha explicado que también se le ha retirado el pasaporte y se le han aplicado las medidas de prohibición de salir del país, alejamiento mínimo de 200 metros de la víctima y prohibición de comunicación por cualquier vía con la víctima.
Fuentes del monasterio citadas por TV3 señalan que han acogido la denuncia con incredulidad, y que trataría de una confusión. Según su relato, el pasado día 15 y tras la celebración de una misa, el monje detenido estuvo con una familia conocida suya y jugando con su niña a hacerle cosquillas. En un momento dado, la niña se levantó la falda y ell mlnje la habría tocado, instante que un turista alemán de visita captó en una foto que consideró sospechosa y trasladó a los Mossos. Los padres de la niña, por contra, no consideran anómala la actitud del monje y no han presentado denuncia.
En la misma nota, el monasterio, fundado en el siglo XII y considerado uno de los conjuntos monacales más importantes de Europa, brinda su «plena colaboración con las autoridades policiales y judiciales para aclarar los hechos y depurar las responsabilidades que se pudieran derivar, respetando siempre el derecho a la presunción de inocencia del acusado». Poblet expresa su «solidaridad y apoyo a todos aquellos que se puedan sentir afectados con estos hechos, particularmente con la familia de la menor».
«Nos duele profundamente esta situación y manifestamos de manera contundente el compromiso y la voluntad de luchar contra todo tipo de abusos a la Iglesia. Este Monasterio, lugar estimado por los catalanes y gente de todo el mundo por la acogida religiosa y cultural que aquí se presta, con las oportunas medidas de prevención que se están implementando, debe ser siempre un lugar absolutamente seguro para la infancia y la juventud. Nos encomendamos a vuestra oración».
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