El conductor del coche francés accidentado en Gerona tenía retirado el carné desde diciembre
El joven, de 22 años y vecino de Perpiñán, había cometido varias infracciones y dado posiitvo en controles de alcoholemia
El conductor francés que presuntamente habría provocado el accidente de ayer en la carretera N-II en Pont de Molins (Gerona), en el que resultaron muertas siete personas y otra heridad de gravedad, tenía retirado el carné de conducir desde el 10 de diciembre pasado, es decir, hacía casi cuatro meses, a causa de múltiples infracciones , entre ellas varias alcoholemias.
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El consejero de Interior de la Generalitat, Jordi Jané , ha confirmado la noticia adelantada por La Vanguardia, añadiendo que el herido grave en la colisión del sábado está «estable dentro de la gravedad«», pero que parece que podrá recuperarse. Según fuentes de los Mossos consultadas por Efe, el resto de ocupantes del vehículo, también fallecidos, tenían múltiples antecedentes por robos, desacato a la autoridad y tráfico de drogas .
Los Mossos han encontradon en el interior del vehículo que presuntamente causó el siniestro 6.570 euros y varias botellas de alcohol
Los Mossos han contabilizado que dentro del coche había 6.570 euros, una «cantidad significativa de dinero» para cinco jóvenes, ha apuntado Jané, quien ha recordado que el caso se está investigando. El consejero ha hecho un llamamiento a que las personas que no tengan carné de conducir o se les haya retirado por infracciones no conduzcan y ha avanzado que la comisaría de Movilidad de los Mossos tiene lista una propuesta para que haya cambios en la penalización sobre aquellos que conduzcan sin carné, una cuestión sobre la que la Generalitat está en contacto con el fiscal superior de Cataluña y con el fiscal de sala sobre cuestiones viarias.
En el accidente de Pont de Molins murieron siete personas , todas de nacionalidad extranjera y de entre 19 y 38 años, y otra resultó herida grave. El siniestro, el tercero más grave en Cataluña desde 2002, se produjo en el kilómetro 763 de la N-II, en una curva conocida como «curva de la muerte», en uno de los tramos más conflictivos de esta vía que lleva 20 años pendiente de desdoblar. Cinco de las víctimas, entre ellas el conductor al que le habían retirado el carné, viajaban en un Golf Volkswagen con matrícula francesa y las otras dos en un vehículo Dacia Sandero con matrícula española.
Todos los ocupantes del Golf iban sin cinturón y murieron en el acto: el conductor de 22 años era vecino de Perpiñán (Francia); otros dos, hermanos de 22 y 20 años, eran naturales de Marruecos pero con residencia en Francia ; el cuarto, de 19 años, era tunecino residente en Toulouse ; y el quinto ocupante iba indocumentado.
En el otro turismo, un Dacia Sandero, viajaban tres vecinos de Figueres, dos de los cuales iban a trabajar a un restaurante del Pertús, uno originario de Colombia de 38 años y otros de Marruecos de 31, y ambos resultaron muertos.
