La Justicia catalana avala el toque de queda en los municipios con más incidencia de coronavirus
La Fiscalía pidió al TSJC que no autorizara algunas de las medidas propuestas
Las restricciones nocturnas afectarán a 126 poblaciones
Restricciones para Navidad comunidad a comunidad
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha ignorado las consideraciones de la Fiscalía y ha avalado este jueves el endurecimiento de restricciones propuestas por el gobierno de la Generalitat para intentar hacer frente a la sexta ola del Covid. Cataluña tendrá, así, desde esta misma madrugada, un toque de queda entre la 1 y las 6 horas en los municipios de más de 10.000 habitantes y con más incidencia de coronavirus, que con las condiciones actuales son 126 municipios.
En concreto, con las nuevas medidas se verán afectadas aquellas poblaciones con más de 250 casos por cada 100.000 habitantes, entre los cuales están prácticamente la totalidad de los del área metropolitana de Barcelona y la otras tres capitales provinciales. En ellos, los Mossos d'Esquadra intensificarán los controles.
Además, el territorio catalán tendrá a partir de las 00 horas una limitación de diez personas como máximo en las reuniones sociales y los aforos en sectores de restauración, comercio, cultura o deporte pasarán a estar reducidos, al 70%, mientras que los negocios del ocio nocturno, que preveían estos días su época de más facturación de un año que ha sido especialmente difícil para ellos, deberán bajar la persiana.
También se mantendrá el uso del pasaporte Covid , y las medidas se mantendrán en vigor 14 días desde el viernes, es decir hasta el próximo 7 de enero. Los jueces consideran "idóneas" las medidas y más teniendo en cuenta la particularidad de los próximos días con las fiestas navideñas.
Temor a 25.000 casos semanales
La Sala Contenciosa ha valorado el último informe presentado por los agentes sanitarios del Govern, que constataba con datos que la incidencia de casos seguía "en aumento notablemente" y con un aumento de casos un 28% superior al de la semana anterior. El mismo barajaba que, de no endurecerse las medidas, Cataluña podría llegar a tener 25.000 casos semanales a principios de enero.
La Generalitat, de hecho, propuso estas medidas a principios de semana , alegando que la crítica situación por la variante Ómicron lo requería y desde entonces sus responsables no han dejado de lanzar mensajes en la misma línea. «Somos conscientes de que estamos restringiendo derechos y libertades, pero es necesario», aseguró entonces la portavoz del Govern, Patrícia Plaja.
La Fiscalía Superior de Cataluña había puesto las dudas sobre algunas de las medidas propuestas por la Generalitat y había considerado que algunas de estas medidas son « severas » y no han sido «debidamente motivadas».
