Cáritas Barcelona ve riesgo de exclusión en el 40% de las familias con niños
La ONG eclesial pide aumentar el gasto social en apoyo a la infancia y las familias
Un 36% de las familias atendidas ha tenido que reducir su gasto en alimentación
La crisis económica posterior a la pandemia se está ensañando con las familias con menores de edad. Así lo ha denunciado este viernes Cáritas Diocesana de Barcelona , que ha puesto negro sobre blanco los problemas de pobreza en este colectivo. «Los menores de 18 años son un colectivo poco protegido en nuestro país. Si la media de los países de la Unión Europea destina un 2,4% del PIB a gasto social en familia e infancia, España solo dedica un 1,3%», ha avisado el director de la ONG eclesial, Salvador Busquets.
Según los datos recogidos por Cáritas en el Informe FOESSA 2022, presentado hoy ante la prensa en presencia del obispo auxiliar Javier Vilanova, la exclusión social de los hogares con niños y adolescentes es del 40%, cifra que duplica la de las familias sin pequeños. Esta situación es todavía más intensa en los hogares monoparentales, donde el 50% está en situación de pobreza. «Casi la mitad de los hogares con menores tienen dificultad para llegar a fin de mes, y el 43% no dispone de ingresos para gastos imprevistos. Son familias muy vulnerables y la pandemia ha agravado su situación», ha avisado Miriam Feu, responsable de análisis social de Cáritas.
A día de hoy, las familias atendidas por la pastoral social de la Iglesia manifiestan dificultades en casi todos los ámbitos de la vida cotidiana. Así, un 36% ha tenido que reducir los gastos en alimentación y un 52% los gastos en vestido y calzado. Algunas, el 11% han ido más allá y se han visto forzadas a compartir piso con personas desconocidas, algo muy lesivo para la intimidad y el desarrollo de los más pequeños que repercute también en sus resultados escolares.
La situación general, ya complicada para los sectores más vulnerables desde antes del estallido de la pandemia, se ha extremado con la crisis sanitaria. De hecho, según la ONG un 20% de las familias atendidas viven sin ningún tipo ingreso, 16 puntos más que antes de la pandemia, situación que tiene consecuencias en ámbitos tan variados como la vivienda, la alimentación o la salud mental. Sobre este último punto, tan comentado en los últimos tiempos, Cáritas advierte que el 67% de los padres y madres de familias acompañadas presentan riesgo de sufrimiento psicológico , triplicando la situación del conjunto de la población de Barcelona.
« Todas estas dificultades son un enorme obstáculo en las oportunidades académicas de los niños , y puede acabar alimentando los porcentajes de pobreza y de exclusión futuras», ha lamentado Feu. Sobre la utilidad de iniciativas como el Ingreso Mínimo Vital para solucionar estas situaciones, desde Cáritas reconocen que este mecanismo no ha servido para apaciguar el sufrimiento de estas familias. A día de hoy, han revelado, solo un 9,9% de las familias con niños y adolescentes atendidas por Cáritas Barcelona cobran la Renta Garantizada de Ciudadanía (RGC) o el Ingreso Mínimo Vital (IMV).
Por todo ello, desde Cáritas han reclamado a las administraciones anteponer el interés y la protección de los menores aumentando el gasto en protección social hasta elevarla hasta la media europea. También han pedido aumentar la prestación por hijo a cargo y garantizar el acceso a Internet a las familias más vulnerables, asegurando así que no se abra una «brecha digital» entre ricos y pobres que impida la educación de los hijos o la inserción laboral y social de sus padres. En cuanto a la vivienda, Cáritas pide la ampliación del parque público, más viviendas por la mesa de emergencia social y garantizar el acceso a los suministros.
Relacionando la complicada situación descrita por Cáritas con la Navidad y el sentimiento de esperanza que le otorga la Iglesia, el obispo auxiliar Javier Vilanova ha invitado a toda la ciudadanía de Barcelona a implicarse en la ayuda de los más desfavorecidos. Finalmente, ha pedido que estas fechas sean sinónimo de luz, y que, a pesar de la pandemia, todo el mundo tenga una estrella que le guíe en medio de la oscuridad y la incertidumbre que nos ha tocado vivir.