Un ataque 'hacker' devuelve 37.000 universitarios a la tiza y el papel en la UAB
La universidad desmiente que los 'hacker' pidan rescate de tres millones de euros en bitcoins
Lafuente, rector del centro universitario, espera recuperar los correos electrónicos y la intranet la semana que viene
El pasado lunes, 11 de octubre, los servidores informáticos de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) sufrieron un ataque 'hacker' que interrumpió la actividad digital en todo el campus. Se vieron afectadas herramientas fundamentales en el día a día de los alumnos como el correo electrónico, las bases de datos o el Campus Virtual. El colapso fue general y desde entonces la actividad académica no ha vuelto a la normalidad. Tras el ataque, varias facultades cancelaron las clases y los profesores empezaron a apañárselas para seguir sus clases sin depender de la tecnología.
Como avanzó ABC ese mismo día, el 'hackeo' se trataba de un ataque 'ransomware', un tipo de virus informático que secuestró la información del sistema de la Autónoma para exigir el pago de un rescate. En un primer momento, la UAB decretó una cuarentena digital en todo el campus. Nadie podía conectarse a la red de la universidad, ni siquiera desde un dispositivo propio. Los servicios informáticos del centro activaron además el protocolo de desconexión total que, tras más de un año de pandemia con las clases volcadas en la red, devolvía la universidad varias décadas atrás. Cualquier servicio vinculado a la intranet del campus (una suerte de internet privado para alumnos y docentes) quedó inutilizado. La UAB –la segunda mayor universidad catalana con más de 37.000 estudiantes y 3.000 profesores– quedó completamente incomunicada.
«Parece una broma«
«Parece una broma de mal gusto, justo cuando empezábamos a recuperar la normalidad después del Covid viene esto», explicaba esta semana Adrià Regàs, estudiante al que el 'hackeo' ha borrado un trabajo que entregó a través del Campus Virtual: «Por suerte, nunca lo eliminé de mi ordenador y he podido entregarlo de nuevo mediante un correo electrónico personal».
Como él, los alumnos de la UAB han vuelto abruptamente a la educación analógica tras dos años de pandemia que han supuesto un cambio de paradigma educativo en las universidades. «Llevamos casi dos años donde todo es 'online' y ahora parece ser que volveremos a los años 90», bromea.
El campus de la UAB, ubicado apenas a diez kilómetros de la capital catalana, ha sido esta semana un lugar yermo de conexión a internet e incomunicado, donde la escasa cobertura móvil de la zona ha demostrado no estar preparada ante un pico de demanda de estas dimensiones. Así estará, al menos, hasta finales de la semana que viene, apuntó ayer Javier Lafuente, rector de la UAB, tras la reunión que mantuvo con el vicepresidente de la Generalitat, Jordi Puigneró, y la consejera de Universidades, Gemma Geis. Lafuente espera recuperar en unos días el acceso a los correos e internet.
Mientras tanto, los profesores se han visto obligados a enmendar la situación día tras día, sorteando infinidad de contratiempos y atendiendo las súplicas de los estudiantes, muchos acostumbrados a seguir las clases desde sus casas. En ocasiones, los docentes han optado por dar su correo personal, puesto que el de la universidad está vinculado a la intranet.
Jordi Hernández, comisionado del rector para las TIC, reconoce que el entorno virtual de la universidad deberá ser reconstruido desde cero. En cuanto al supuesto rescate de tres millones de euros en bitcoins que habrían exigido los piratas informáticos que propiciaron el ataque, desde la UAB afirman que en ningún caso se han puesto en contacto con ellos. No obstante, reconocen que es muy probable que opten por poner una cantidad sobre la mesa. Por ahora, la UAB promete que no pagará a nadie a cambio de recuperar la normalidad digital.
Asimismo, durante esta semana la universidad ha hecho saber a sus alumnos a través de un comunicado que prepara un plan de contingencia para atender a las necesidades urgentes.
Hasta Navidad
Con todo, los responsables del campus no se muestran especialmente optimistas y subrayan que, los problemas derivados del 'hackeo' se pueden alargar más tiempo del deseado. La previsión, avisan, es recuperar la normalidad antes de Navidad, en un plazo máximo de dos meses.
De momento, los técnicos informáticos ya tienen disponible una herramienta de cribado que detecta los equipos que han sido afectados dentro del campus. Ésta, examinará en primera instancia los ordenadores portátiles del centro, aquellos que hayan sido infectados, deberán ser formateados y limpiados de cero. Mientras tanto, en la UAB, los alumnos volverán a la libreta y la tiza.