Antonio Gallego Burgos - Tribuna abierta
A propósito de Julen
«Julen, un chaval de 5 años que vive en un pueblo de Guipúzcoa, no sabe decir ni una sola palabra en español»
Julen, un chaval de 5 años que vive en un pueblo de Guipúzcoa, no sabe decir ni una sola palabra en español. No oye una palabra en la lengua común de los españoles ni en casa, ni en la escuela. Esta situación, que observé en primera persona mientras pasaba unos días en un camping con mis tres hijos, impedía que el niño se adaptara en los juegos de un grupo de niños barceloneses, zaragozanos y madrileños que, lógicamente, se comunicaban entre ellos en castellano.
Expliqué esta situación en Twitter y se montó la de San Quintín. Muchísimos internautas empezaron a explicar experiencias vividas similares y, como no podía ser de otra manera, los abducidos nacionalistas alegaron que eso era imposible y que la anécdota explicada era producto de mi imaginación. Llegaron a cuestionar que estuviera en un camping porque soy de derechas e, incluso, que tuviera hijos. Ya se sabe, cosas de aburridos ‘haters’ escondidos en el cobarde anonimato.
En cualquier caso, me sorprendió muchísimo cómo molestó que explicara una realidad como un templo. Muchos niños en Cataluña y el País Vasco no dominan adecuadamente el español. En el caso de Julen, lo más probable es que no reciba educación en español hasta tercero de primaria y lo aprenderá como lengua extranjera, tal y como explica el informe ‘Modelos educativos en el País Vasco. Teoría y realidad’ elaborado por la asociación Hablamos Español.
Esta situación está, obviamente, patrocinada por el gobierno vasco que también necesita ‘independizar’ cultural e idiomáticamente su comunidad para alcanzar sus declarados objetivos políticos separatistas. No es casualidad que la consejería de educación vasca promocione la escolarización en el ‘modelo D’, que supone optar por todas las materias en euskera salvo Lengua Castellana. Desde VOX defendemos que hay que garantizar el derecho a ser educado en español en todo el territorio nacional y que el español sea lengua vehicular obligatoria en toda España.
Sabemos perfectamente que cuando defendemos esta posición recibimos campañas de difamación y ataques sin cuartel por parte de los separatistas que han venido utilizando la escuela pública para tratar de alcanzar sus ensoñaciones de ruptura de la unidad nacional. No nos callarán. Seguiremos denunciando lo que pensamos que es una verdadera vulneración de derechos educativos y lingüísticos de las familias en media España.
Antonio Gallego Burgos es Portavoz Adjunto de Vox en el Parlament