Castilla y León, en «alarma» por riesgo de incendios forestales

Cualquier chispa puede originar un incendio forestal con «gran potencial de crecimiento y consolidación»

Incendio en la Sierra de Francia (Salamanca) ICAL

M. G.

Valladolid

Desde el pasado domingo, una masa de aire caliente en altura está provocando un importante y sostenido incremento de las temperaturas, que «desecan totalmente la vegetación y la convierten en altamente inflamable». En este escenario de altos índices de ignición, cualquier chispa puede originar un incendio forestal con gran potencial de crecimiento y consolidación. Por ello, desde la Junta de Castilla y León se ha declarado la situación de «alarma» hasta el próximo martes por el importante incremento del riesgo de fuegos, lo cual implica una serie de restricciones para los trabajos agrícolas y actividades cotidianas.

Así, Castilla y León, que estaba en «alerta» -un rango de riesgo inferior- desde el 10 de julio, requiere ahora «extremar las precauciones» y una rápida reacción. El Ejecutivo autonómico insta a la ciudadanía a que «avise inmediatamente a través del 112 sobre la existencia de posibles incendios forestales», ya que la baja humedad del combustible tras un año de sequía, unida a las altas temperaturas, incrementan la probabilidad de ignición, propagación y consolidación de los incendios. «Factores que provocan que los incendios desarrollen comportamientos convectivos con condiciones de propagación extremas y virulentas, fuera de la capacidad de extinción durante largas fases del día e incluso de la noche».

Son condicionantes que recientemente han complicado las labores de extinción en incendios como el de la Sierra de la Culebra o el que actualmente asola la Sierra de Francia. En ambos casos, los rayos fueron la causa y no se descarta que en las próximas horas ese origen natural genere nuevo focos. Y es que la situación de inestabilidad en altura, por influencia de la DANA, podrá generar nubosidad de tipo convectivo en forma de tormentas secas con poca cantidad de precipitación, pero con posibilidad de rayos y rachas fuertes de viento.

Y aunque las miradas apunten al cielo tras la acumulación de fuegos en las últimas horas por rayos, desde la Junta marcan también la ruta para la prevención de fuegos provocados por la mano del hombre y establece una serie de medidas como la suspensión las autorizaciones de uso del fuego y fuegos artificiales, la prohibición del uso de barbacoas y de los ahumadores de la actividad apícola. Su chispa en escenarios bajo temperaturas de 40 grados y rachas de vientos que pueden superar los 60 o 70 kilómetros por hora, puede ser demoledora.

Se restringen, asimismo, los trabajos en el monte y en la franja de 400 metros de terreno que lo circunde con cosechadoras empacadoras, desbrozadoras o equivalentes; tampoco podrán realizarse con cualquier otra maquinaria que genere deflagración, chispas o descargas eléctricas (sopletes, soldadoras, radiales). Además, es obligatorio disponer de medios de extinción y personal suficientes para controlar los posibles incendios que se puedan originar como consecuencia de las labores.

Durante la vigencia de la 'Situación de Alarma' se recomienda a toda la población evitar el tránsito libre por los montes excepto en el acceso a la propiedad o a entornos urbanos, el desarrollo de las actividades profesionales o de ocio autorizadas, las actuaciones de emergencia o interés general, y para realizar trabajos de vigilancia y extinción de incendios forestales.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación