Coronavirus / En primera línea

«Vivo con más preocupación que miedo el coronavirus. Pero no hay trabajo»

Ángel Lucio Fernández aguanta cada día con su taxi paciente a que llegue algún cliente

Lucio Fernández, en su taxi de la calle María de Molina ABC

I. JIMENO

Por ahora con «preocupación, más que miedo», Ángel Luico Fernández aguanta sentado al volante de su taxi esperando a que llegue algún cliente. Es un servicio básico y ya lleva más de hora y media desde que comenzó la jornada y aún «no he hecho ninguna carrera», certifica con resignación este profesional del volante, a quien su labor permite seguir saliendo cada día a la calle a trabajar pese a la situación de alerta en la que se encuentra España por la pandemia del coronavirus. «Pero lo que no hay es trabajo», lamenta mientras se entretiene con unos pasatiempos.

Por ahora, dice, no tiene miedo al contagio, y eso que en un habitáculo tan pequeño como un coche es complicado mantener las distancias de seguridad recomendadas . «Nos han obligado, y es lógico, a que como máximo haya dos personas» de ocupantes, señala. Unos entran con mascarilla; otros, no. Entre sus precauciones, el bote de alcohol con el que limpia sobre todos las manetas de las puertas cuando baja uno de los pocos clientes.

Está en la parada de la céntrica calle de María de Molina de Valladolid . Tan sólo él y otro compañero, dispuestos a llevar a los clientes. Pero «no hay». El lunes, en todo el día hizó seis viajes, lo que ya debía llevar ayer a las once de la mañana, pero el taxímetro ni se había movido una sola vez. La afluencia de clientes «ha caído mucho», y eso que es zona de oficinas, pero no hay reuniones ni trámites a los que acudan... Tampoco los mayores, principales clientes en horario de mañana para ir a consultas sobre todo, salen de casa.

Ya desde el viernes se comenzó a notar la disminución. «Ha caído mucho». ¿Y cómo les va a afectar? «¡Bua! Bastante. Bastante», responde sin pensarlo Ángel Luicio Férnández, mientras hace unos cálculos que casi prefiere no sumar sobre las facturas que tiene sobre la mesa: licencia, cuota de autónomos... «Habrá que pagarlo... Y si no hay ingresos, aguanteremos, no sé cuánto». «Un mes como mucho», estima haciendo un esfuerzo.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación