Alejandro J. García Nistal - Noción personal
La última del año
«A los castellano y leoneses nos convendría una autopista de afecto y hechos con el Ejecutivo que salga elegido»
Uno de los primeros títulos de este espacio rezaba algo así como: 2015, año de elecciones. Y lo cierto es que así ha sido. Arrancábamos con ecos de Europa, municipales y regionales, Cataluña por partida doble, andaluzas… Y así hasta llegar a las generales, la última votación a la que estamos llamados los dos millones y medio de castellano y leoneses. Bueno, los de edad de votar.
En nuestra Comunidad, el PP parte con una clara ventaja en número de diputados y senadores. Incluso hemos tenido importantes figuras en diversos organismos de Gobierno estos cuatro años, pero ¿cuál es la sensación general de esta legislatura? Tan sólo valdrá la opinión de la fuerza de los votos el próximo mes. Ahí se verá la reválida. El resto, atinadas o no, son opiniones. El periodista ha escuchado y leído hasta la saciedad en estos cuatro años que el eje Valladolid-Palencia-Burgos se ha reforzado aún más por el desarrollo y progreso de Castilla y León, algo que debería tener satisfechos a los habitantes de esas tres provincias pero ¿y las otras seis?
Tampoco le ha ido del todo mal a Zamora. Al menos en infraestructuras, le ha tocado parte del esfuerzo inversor en tiempos de recortes, como a Salamanca. Bien, pero insisto, restan otras cuatro: Soria, Segovia, Ávila y León, curiosamente donde el PP mantiene abiertos procesos de cambios en su estructura directiva. Y es que la debilidad de una fuerza política comienza por la división y si las administraciones locales, provinciales y regionales no trabajan en comunión con la estatal, poco se puede hacer.
A la feroz crisis económica que hará de esta legislatura, la de los recortes y la de preparar la recuperación, hay que añadir los intereses necios por distinto color político de las administraciones. A los castellano y leoneses nos convendría una autopista de afecto y hechos con el Ejecutivo que salga elegido.