Vox matiza su propuesta sobre la Ley de Violencia de Género: «tocar», pero no «derogar»

Vox ha templado los ánimos y también sus aspiraciones. Ya no hablan de «Mañueco el progre», expresión que su candidato Juan García-Gallardo justificó ayer en «el calor de la campaña». Lo hizo al concluir la reunión que mantuvo con Alfonso Fernández Mañueco .

Durante el encuentro tampoco pusieron líneas rojas en aspectos ideológicos como llegaron a señalar en un primer momento, cuando pidieron derogar tanto la Ley autonómica de ayuda a las víctimas de violencia de género como el Decreto de la Memoria Histórica. En este sentido, García-Gallardo aseguró que su formación política lleva en su ADN proteger a las mujeres de forma distinta a cómo lo hace el PSOE, al que acusó de alentar la «inmigración irregular» que «es una amenaza» para las mujeres, y se refirió a los grupos procedentes del norte de África que, porcentualmente, son los que protagonizan un mayor número de agresiones «en manada». Sobre la memoria histórica, planteó acabar con una normativa que realiza un relato «fragmentario» en el que hay «abuelos buenos y abuelos malos».

Precisamente respecto a la Ley de Ayuda a las Víctimas de Violencia de Género o al Decreto autonómico de la Memoria Histórica , el popular, principal aspirante a presidir la Junta, aseguró al término del encuentro que «casi no se ha hablado de ello porque ya estábamos de pie». Sin embargo, García-Gallardo afirmó que tenía «la impresión» de que el PP veía «posible y razonable» sus propuestas de «tocar» esta normativa. Ya no habla de derogar, como en campaña dijo querer hacer con esta normativa. Vox reclama que, en el primero de los casos, se equipare a todas las víctimas sin distinción de género y, en el segundo, que se elimine cualquier «sesgo ideológico». Pero para Mañueco «ahora no toca» hablar de esos asuntos.