Guillermo Garabito - La sombra de mis pasos

Teoría del buche

«Comer es el arte. Por donde ha pasado la cuchara ha pasado el Renacimiento»

GUILLERMO GARABITO

Tengo un amigo que no se fía de la gente a la que no le gustan los callos. Y otro que quiso echarse una novia vegetariana, pero en la segunda cita ya no sabían dónde ir a cenar. Aquella relación se les murió de inanición, supongo. Hace tiempo, ingenuo, le pregunté a un amigo vegetariano qué hacían para suplir las vitaminas, proteínas y demás. «¡Se compran complementos alimenticios en pastillas, hombre!» A mí me pareció que para eso mejor se hace uno astronauta y come deshidratado y soso pero con vistas.

Comer es el arte. Por donde ha pasado la cuchara ha pasado el Renacimiento. Pero hay ciertos alimentos que, con esto de las modas, se ven obligados a echarle gracia también. Una empresa charra ha decidido sacar la panceta en paquete farmacéutico y bautizarlo como «Pancetamol». No quita el dolor de cabeza pero da alegría.

De gastronomía sabían Cunqueiro y Pla, que tenían el morro fino. Y Camba. De Camba yo aprendí sobre todo a comer, y a probar los platos nuevos a su manera. «Al comer mi primera fabada, yo procedí como procedo siempre... Me tomé un plato. Me tomé otro. Y cuando terminé el segundo plato, me dije: ¡Hombre! Esto de la fabada no parece que esté nada mal. No va a haber más remedio que decidirse a probarla».

Después Cela tenía la costumbre de «conversarse» unas botellas de vino, como dicen los chilenos, con algún afamado artista. Y así se presentaba el gallego en las casas ajenas: con tres botellas de «Vega Sicilia» que hacía firmar a sus ilustres anfitriones una vez se habían encargado de «conversarlas» bien. Por mi cumpleaños me gustaba cocinar para unos cuantos amigos en casa. Hasta que unos se hicieron vegetarianos, a otros se les ocurrió hacerse alérgicos a la lactosa y a otro, vaya usted a saber por qué, dejaron de gustarle los tomates. Con amigos así cualquiera celebra nada.

Comer bien es un arte. Y hacerse vegetariano debe de ser arte moderno.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación