Ana Sánchez: «Las urnas van a poner a Igea en su sitio más pronto que tarde»

Con su habitual locuacidad y sin pelos en la lengua, la secretaria de Organización del PSOE en Castilla y León, Ana Sánchez, cargó ayer contra el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y, con mayor intensidad, contra el vicepresidente, Francisco Igea. Lo hizo durante la tertulia política COPE-ABC en la que acusó al Gobierno PP-Ciudadanos de estar «muy a la deriva» y «haber volado todos los consensos autonómicos construidos en 30 años», en referencia a la reforma del Estatuto, al pacto por la financiación o el diálogo social.

Aunque aseguró que el PSCL «no sangra por la herida» tras ver como se le escapaba el Gobierno autonómico a pesar de haber ganado las elecciones en la Comunidad, acusó a Igea (Cs) de haber resultado ser «un fraude electoral para los que depositaron en el su confianza» y le criticó «que no se reuniese públicamente con el ganador que quedó a seis escaños de la mayoría», como fue el PSOE. «Hicieron un pacto de rapiña, era legítimo, pues que se pongan a gobernar que falta nos hace», sentenció.

Y siguió con el vicepresidente de la Junta para reconocer que «me inspira cierto tedio, un sopor soberano porque es capaz de decir una cosa y la contraria con el mismo desparpajo en poco tiempo», pero también tiene muy claro que a Igea «le van a poner las urnas en su sitio más pronto que tarde».

Al presidente de la Junta dedicó otro rosario de «lindezas» como que en «vez de tender la mano y buscar consenso se dedica a romperlo todo» o que «no tiene palabra y no le veo un hombre de Comunidad». A su juicio, Fernández Mañueco «tiene que demostrar altura política y hasta la fecha no lo está demostrando».

De la crítica pasó al halago para referirse al secretario general del PSCL, Luis Tudanca. Así, negó que haya arrancado la legislatura con un «perfil bajo» y pocas apariciones públicas. «No ha dejado de patear el territorio ni un día que es donde ganó las elecciones y nunca habíamos sentido tanto afecto», explicó. También negó que esté «tocado» por no gobernar. «Es que es muy de la tierra, muy austero», argumentó.

Sobre la huelga general de empleados públicos convocada por los sindicatos para el 6 de noviembre, afirmó no querer inmiscuirse en las decisiones de los representantes sindicales pero acusó al PP de «fraude electoral» por prometer en campaña electoral la jornada de 35 horas y luego no cumplir. «Han sido demasiado frívolos y lo van a pagar», sentenció.