El camino de viñedos que marca los pasos hasta Santiago
Las rutas de «El Cavino» combinan etapas de la ruta jacobea con la visita a bodegas de cinco Denominaciones de Origen
Son múltiples las rutas que llevan hasta Compostela. El Camino francés, el de Bayona, la Vía de la Plata... Cada una tiene su esencia y ofrece al peregrino la posibilidad de optar por el itinerario que más se amolde a sus gustos. Entre ellas, se cuela una de más reciente creación, cuyo origen no bebe de la espiritualidad ni se remonta cientos de años atrás en el tiempo pero que en el siglo XXI está ganando cada vez más adeptos: «El Cavino» , un viaje hasta Santiago regado con los mejores vinos.
Se trata de una invitación a saborear la tradición, la calidad y la esencia de siglos de historia en un singular recorrido por el Camino de Santiago visitando cinco bodegas de Denominaciones de Origen internacionalmente reconocidas: Rioja, Ribera de Duero, Toro, Bierzo y Ribeira Sacra , que deben parte de los que son a la ruta jacobea. Y es que los pasos de los caminantes que perfilaron esos recorridos tradicionales hacia Santiago fueron determinantes en la viticultura nacional, ya que fueron innumerables las cepas que llegaron a España de la mano de peregrinos y monjes que vinieron a repoblar o cristianizar la Península Ibérica.
La escapada, de ocho días de duración, recorre seis etapas no consecutivas del Camino francés, el de Levante y el de Invierno. Sus participantes no obtienen el jacobeo, ni duermen en albergues o avanzan cargados con todos sus enseres encima. En este caso, el planteamiento es distinto. Esta ruta enológica a Compostela incluye hoteles de 4-5 estrellas, un autobús para los desplazamientos y maletas y menús en los que más que el bocadillo impera la gastronomía típica de cada zona.
El viaje arranca en el mundialmente reputado mar de viñas de La Rioja, para adentrarse después en la Ribera de Duero , degustar un genuino lechazo y despertarse a los pies de la Catedral de Burgos. Los pasos por la orilla del Duero diseccionan también vides de Rueda y Toro antes de dirigirse al Bierzo, donde dejarse atrapar por el castillo templario de Ponferrada antes de saborear los vinos de uva Mencía.
El recorrido ya salta después a Galicia. La Ribiera Sacra, donde sus viñedos distribuidos en terrazas y bacanales para salvar la pendiente convierten en héroes a los viticultores de esta zona, protagonista de la última etapa antes de alcanzar Santiago y su Plaza de Obradoiro .