Guillermo Garabito - La sombra de mis pasos
«Pringar» hasta en verano
«...nuestros políticos, que no cumplieron durante el curso, quieren irse ahora a la playa o a caminar a Galicia como si ya nada pudieran hacer para evitar unas terceras elecciones»
Cualquiera diría que a Tudanca le han prometido ser ministro en ese cada vez menos previsible gobierno alternativo. Ser ministro a cambio de no irse de vacaciones este año. Y pasarse agosto de turné por los platós televisivos mientras su secretario general se «morenea» en alguna playa de incógnito. Incluso Meritxell Batet evita el tema sobre el paradero de Pedro Sánchez cuando le preguntan de las últimas semanas a esta parte.
«Todos estamos trabajando. Eso no quita para que el señor Sánchez pueda irse un fin de semana a la playa…» dijo la socialista. No quita pero suma en ese arribar en terceras elecciones que ya algunos parecen tener muy asumido. A Rajoy tampoco le debe de urgir mucho formar gobierno. Se reúne con Rivera y se da otra semana para convocar a su Comité Ejecutivo Nacional y después ya se verá.
Puede ser por todo esto que le haya tocado a Tudanca quedarse de barón de guardia mientras Susana simula –hasta que pase «la calor»– acatar esa ley del silencio que corre por el PSOE. Sabe «la sultana» que Madrid en agosto es la Rusia que se tragó a Napoleón y a Hitler juntos. Luis Tudanca se ha erigido como portavoz vacacional de un PSOE agostado. Y se deja ver en Madrid y en todos los salones nacionales donde aún queda algún televisor encendido y recalentado dando la murga con una programación insulsa y veraniega.
En Castilla y León no cogemos vacaciones. En mi casa siempre dijeron que las vacaciones eran para quien se las ha ganado durante el curso. Si no el verano se pasa «pringando» y así se aprende para el siguiente. Eso debería haber ocurrido con nuestros políticos, que no cumplieron durante el curso y quieren irse ahora a la playa o caminar Galicia como si ya nada pudieran hacer para evitar unas terceras elecciones.
El jueves desayunaba Tudanca en las mañanas de la Cuatro. Y la semana pasada se paseaba por los platós de La Sexta. En vacaciones, en Castilla y León, no hay demasiado que hacer. Quizá por eso –para aprovecharlas– se ha metido Tudanca a tertuliano. Ya en septiembre habrá que volver a la rutina. Y a la depresión postvacacional de cambiar lo nacional por lo autonómico, que no es tan mediático ni «tuiteable».
