Prefiero negociar la PAC a dar un mitin
Vallisoletana de pro, lleva a gala ser alumna de La Enseñanza (Compañía de María), a cuyas profesoras fue a dar personalmente las gracias nada más ser nombrada ministra. Su vocación hacia el medio rural fue la razón para convertirse en ingeniero agrónomo , «con el objetivo de ayudar a través del desarrollo del sector agrario».
Completó los estudios con la licenciatura de Derecho para seguir después formándose en Francia y EEUU, antes de recalar en Bruselas, bajo el paraguas de la Junta, y después en la empresa privada y en el Ministerio. Reconoce que como mitinera no se siente cómoda. « Estoy mucho mejor negociando la PAC en los pasillos del Consejo de Ministros de la Unión Europea », afirma con seguridad, pero tiene menos claro si querría volver a ser ministra porque «me puse una mochila muy pesada a mis espaldas en unos años muy duros».
De misa dominical y cofrade del Nazareno , no cree que sea necesario pregonar su condición de católica practicante, que se debe llevar «con naturalidad». Confiesa su afición a los toros y se define como una «convencida de las mujeres», más que como feminista. Su «rincón» de la provincia es «la parcela» del Pinar de Antequera «en la que pasaba mis veranos» y el preferido de la ciudad, la Academia de Caballería , por la que «pasaba todos los días rumbo al colegio».