Convención Nacional del PP
El PP consolida a Mañueco como candidato y aguarda a su designación
Unanimidad en el respaldo a que el presidente popular regional sea cabeza de cartel en 2019, aunque no todos coinciden en el momento de hacerlo oficial
Intervención con fuerza e ímpetu, llamada a la movilización, defensa del «aval» de lo logrado con la experiencia gobernando, compromisos de futuro y confianza en la victoria. Los ingredientes mezclados en la intervención de Alfonso Fernández Mañueco en la primera jornada de la Convención que el PP celebra este fin de semana en Sevilla y que tuvieron como respuesta el sonoro, prolongando y entregado aplauso del plenario, especialmente de la delegación de Castilla y León .
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La respuesta y el respaldo de la formación de la que desde hace un año es su presidente autonómico se evidenció claramente en el apoyo a su discurso y ahora aguardan a que en el partido se dé un paso más y Alfonso Fernández Mañueco sea designado oficialmente candidato a la P residencia de la Junta de Castilla y León de cara a las elecciones autonómicas de mayo de 2019. De hecho, el también alcalde de Salamanca sale de Sevilla consolidado como próximo cabeza de cartel, sólo a la espera de que Génova dé la bendición oficial.
Distintos ritmos
Con poco más de doce meses por delante y un relevo de candidato tras cuatro citas con las urnas apostando al valor seguro que ha supuesto Juan Vicente Herrera , en el seno popular late la sensación de que es necesario que se haga oficial lo que todos dan por hecho: que Mañueco será el aspirante popular para ocupar el sillón de mando del Gobierno autonómico. Aunque el otro ventrículo del corazón late a un ritmo más pausado y apuesta por acoplarse al ritmo que marca el partido .
Y es que hay para quien en Génova, que es quien marca los tiempos y decide y da el visto bueno a los candidatos autonómicos, ya «están tardando» en esa bendición. «Claro» que ya debería ser oficialmente el aspirante a seguir conservando el poder que el PP atesora al frente de la Junta de Castilla y León desde hace treinta años, comentan algunos populares.
Aunque también hay para quien «da igual» el momento en el que sea oficial esa designación que desde Génova enmarcan en torno al verano. «Ése no es el debate» , señalan. «Los tiempos los marcan otros», afirma algún miembro del PP castellano y leonés, prudente con el momento de la designación, pero, eso sí, con la certeza de que «no hay duda de que es nuestro candidato».
«Paciencia», reclaman quienes no se muestran muy respetuosos con lo marcado por el partido y no quieren precipitar los acontecimientos.
Sin querer entrar a cuestionar el momento en el que debe designarse a Mañueco, pues también él ha «valorado» siempre «mucho» cuando se «respetaban» los momentos marcados, quien sí le mostró ayer claramente su apoyo fue el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera. Candidato en las elecciones de 2015, Herrera recordó que tras haber ganado el salmantino unas primarias hace un año en un proceso «ejemplar», no sólo está «absolutamente convalidado» para ser el cabeza de cartel, sino que «debe ser el candidato». «Que se sepa que Alfonso Fernández Mañueco cuenta, cómo no, con mi apoyo, pero además con mi apoyo absolutamente convencido », señaló en declaraciones a los medios de comunicación.
Un respaldo que repitió de nuevo por la tarde ante el conjunto del partido. Lo hizo durante su intervención en la mesa de diálogo junto a otros dirigentes autonómicos, en la que recordó que él es un «veterano» que desde hace meses ha «entendido» que debe prepararse su relevo tras cuatro citas en las urnas como cabeza de cartel. Y lo sustituirá Alfonso Fernández Mañueco, para quien comprometió estar a su lado y apoyarle en lo que lo necesite.
Tampoco quiso entrar a marcar el tiempo el propio Mañueco. «Lo que tenemos que hacer es no mirarnos a nosotros mismos, sino a las personas», consideró el dirigente regional, quien ha reconocido en otras ocasiones públicamente que su deseo es ser cabeza de cartel en 2019. Pero ahora, dijo, es momento de centrarse en los nuevos retos y elaborar un proyecto «ilusionante, atractivo, de futuro» , anclado en las «raíces fundamentales» que suponen «nuestra gente» y el «aval» de la gestión.
