Sociedad
Polémica en Burgos por la decisión de un vecino de instalar un cenador sobre la muralla medieval
El Ayuntamiento pide la retirada de la estructura y recuerda que «los ciudadanos sólo tienen potestad para llevar a cabo labores de mantenimiento y conservación del monumento»
La ciudad de Burgos se encuentra en medio de una fuerte polémica por la decisión de un particular de instalar un cenador sobre uno de los cubos de la muralla de la ciudad, colindante a su vivienda. La noticia ha saltado a la opinión pública a través de la denuncia de un ciudadano burgalés, Rodrigo Sáiz García , que decidió expresar su indignación a través de las redes sociales, aunque ha recalcado que no lo hizo en condición de abogado, profesión que desempeña, sino como «un ciudadano de a pie que está enamorado de su ciudad».
Desde que se publicaran las imágenes a principios de agosto varios medios se han hecho eco de la noticia hasta el punto de que Ana Bernabé, concejala de licencias del Ayuntamiento de Burgos, ha tenido que salir al paso expresando que el Consistorio «considera que debe retirarse» , ya que «esa parte concreta de la muralla puede ser propiedad del promotor del cenador no lo es así la parte completa donde se ha ejecutado». Además, en una entrevista para RTVCyL, ha recalcado que «los ciudadanos sólo tienen potestad para llevar a cabo labores de mantenimiento, conservación y puesta en valor», acciones que el implicado había realizado previamente. «No debemos olvidar que desde 1973 otros propietarios cedieron la muralla a la ciudad y que ahora es propiedad del Ayuntamiento», ha setenciado.
Esta acción particular que puede poner en peligro la muralla contrasta con el sentimiento de una ciudad que ha conseguido que sea considerada Bien de Interés Cultural y que en el pasado año 2014 celebró la ampliación de la zona de influencia de la Catedral como Patrimonio de la Humanidad, título ofrecido por la Unesco, a todo el casco antiguo de la ciudad. En este sentido, Ana Bernabé también se ha pronunciado y ha afirmado que «el Ayuntamiento no tenía conocimiento de que se estuvieran desarrollando estas obras» hasta el momento de que se produjera la queja ciudadana.