José Gabriel Antuñano - El callejón del gato
El peor Puente
«Óscar Puente continúa con el juego del Pasapalabra que tantos quebraderos de cabeza proporciona a la Ejecutiva autonómica»
Óscar Puente continúa con el juego del Pasapalabra que tantos quebraderos de cabeza proporciona a la Ejecutiva autonómica, que intenta la moderación en el discurso y la propuesta, para mostrarse ante los ciudadanos como posibles artífices de un cambio político en la Comunidad. El alcalde de Valladolid, de frágil encaje cuando critican sus políticas, como ha ocurrido en el debate sobre el estado de la ciudad con Pilar Vicente (Cs), no resiste a expresarse con una espontaneidad ayuna de reflexión. Las declaraciones en el pleno hacia la edil de Cs y las posteriores son machistas, inoportunas, obscenas y olvidadizas con parecidos problemas de compañeros militantes.
Si otro sin el placet del movimiento feminista, que reparte carnets de pureza ideológica, hubiera agredido verbalmente a Vicente, que no es pata negra del Movimiento, tendría una acampada en la plaza Mayor (la diferente vara de medir del Movimiento no es el mejor modo de defender la dignidad, igualdad y paridad de la mujer, pero este es otro tema). Inoportunas, porque ha puesto el foco otra vez en Cs, ahora con problemas de visibilidad, y ha empujado hacia arriba a Vicente que, junto a Igea, pueden disputarle la candidatura a encabezar la lista al insulso Fuentes. Obscenas porque defiende críticas a la gestión con ataques ad hominem, cuando alguien osa criticar la acción política (la obscenidad contamina, envilece y crispa la convivencia). Y si el problema era de currículo tuneado -la edil ha ofrecido explicaciones- ¿cómo olvida los de sus compañeros que se hacen pasar por licenciados, cuando solo han asistido algunas clases o cómo no convence al presidente Sánchez para que haga pública su tesis doctoral, que sí tiene, aunque candada con siete cerraduras?