Politica
Los partidos evidencian la imposibilidad de consensuar un modelo fiscal
Cada formación exhibe su modelo en las Cortes como el mejor y tumban la propuesta del PSOE para reformar el modelo
![Los populares Fernández Carriedo y Sanz Vitorio conversan con el portavoz de Ciudadanos, Luis Fuentes](https://s3.abcstatics.com/media/espana/2015/11/26/pactofiscal--620x349.jpg)
Para gustos los colores, y para opciones de modelo fiscal, el número de partidos políticos. Y prueba de ello el debate vivido este miércoles en las Cortes de Castilla y León, donde las seis formaciones con representación evidenciaron que la posibilidad de consensuar cómo y cuánto tienen que abonar ciudadanos y empresas al pasar por la caja de la administración es tan variada y diversa como colorido el arco parlamentario. Aunque con algún punto en común en ciertos casos, lo cierto es que las diferencias fueron mayores. Reflejo de ello, que la moción planteada y defendida por el Grupo Socialista sólo logró concitar el apoyo del único procurador de IU, mientras que Podemos y UPL se abstuvieron y PP y Ciudadanos votaron en contra, por lo que la iniciativa no salió adelante.
¿Crear o no nuevos impuestos? ¿Cómo modificar los existentes? ¿A quién gravar más? ¿A quién y qué actividades modificar? Pues la respuesta depende de quién la conteste.
Con el argumento de que el actual modelo fiscal aplicado por la Junta de Castilla y León está «obsoleto», el socialista José Francisco Martín defendió sin éxito para atraer los votos de la mayoría de la Cámara uno que consideró «más justo y redistributivo». La reforma del tramo autonómico del IRPF (Impuesto de la Renta de las Personas Físicas), así como del de Sucesiones y del que se aplica sobre el Patrimonio, de modo que aumente su «progresividad» para que «quien más tenga o más gane, más contribuya», fueron algunas de las propuestas defendidas por el PSOE. Además, su modelo incluía gravar la actividad de las grandes superficies –algo cuestionado desde la Unión Europea–, así como los depósitos bancarios o la energía nuclear y térmica, exceptuando la producida por carbón nacional, informa Ical. Adiós a los beneficios fiscales sobre el juego –«huele muy mal», afirmó Martín– a la vez que se incrementa su gravamen un 10 por ciento, establecer deducciones por la adquisición de libros de texto o para pensionistas con familiares a cargo son otras de las medidas incluidas en el modelo socialista. Además, José Francisco Martín incidió en la necesidad de la elaboración «inmediata» de un plan para combatir el fraude fiscal con un mayor control sobre los impuestos que se gestionan, con el consecuente incremento de los medios humanos y materiales, hasta duplicarlos, informa Ep.
Ni siquiera José Sarrión (IU), que apoyó la moción, dio el «sí» con asentimiento total y advirtió de que la apuesta de su formación va «un poquito más allá» en la progresividad. Tampoco desde la otra formación de izquierdas con representación en la Cámara, Podemos, comulgan del todo con el planteamiento socialista. Aunque se abstuvieron, su portavoz en esta materia, Félix Díez , fue especialmente duro, acusando al PSOE de defender una iniciativa de «maquillaje electoral» que representa la «vieja política» y supone un ejemplo de sus «falsas promesas cuando están en la oposición».
Desde UPL, que también se abstuvo, Luis Mariano Santos , respaldó que paguen más quienes más tienen, pero rechazó nuevos impuestos.
«Distancia» e «incoherencia»
Ciudadanos planteó una enmienda de sustitución, ya que su propuesta fiscal está a «distancia considerable» de la planteada por el PSOE, aunque coincidió en reclamar que se «alivie la asfixia fiscal que ha sufrido la clase media» y la desgravación por compra de libros de texto. «Ustedes quieren menos ricos y nosotros, menos pobres», apuntó Belén Rosado .
«No vamos a apoyar su moción por falta de coherencia y falta absoluta de credibilidad» ya que donde gobiernan los socialistas aplican otras medidas, señaló el popular Salvador Cruz para justificar el rechazo de su grupo a la iniciativa. El procurador del PP se mostró «favorable» a las familias y apuntó que desde su partido consideran que es el momento de «devolver» a los ciudadanos el «esfuerzo» realizado durante la crisis, con el fin así de «mejorar el consumo y genera empleo».
Muy molesto con la unión del voto de PP y Ciudadanos e incluso incluyó en el grupo a Podemos, Martín vinculó esto a lo ocurrido en Extremadura, donde la oposición tumbó los Presupuestos del Ejecutivo socialista. «Por eso está tan contento el Gobierno –de Castilla y León– con la oposición que hacen ustedes», concluyó el parlamentario socialista, en referencia a las palabras del día anterior del consejero de la Presidencia, José Antonio de Santiago-Juárez, al afirmar que la verdadera oposición era la ejercida por otros grupos y no por el PSOE.